Puede que la infección por CMV no responda correctamente al tratamiento y se prolongue en el tiempo. Es lo que conocemos por infección refractaria.
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Puede que la infección por CMV no responda correctamente al tratamiento y se prolongue en el tiempo. Es lo que conocemos por infección refractaria.
Hola, mi nombre es María y estamos en el Hospital Gregorio Marañón. En algunos casos puede que la infección activa por citomegalovirus no responda correctamente al tratamiento y se prolongue en el tiempo. Es lo que conocemos por infección refractaria, para comprender mejor por qué se produce y cómo será tratado por los médicos. Hablaremos con el doctor Carlos Ortiz, médico adjunto del servicio de cardiología clínica de este hospital. Quién nos resolverá algunas dudas? Me acompaña El citomegalovirus es la infección oportunista más prevalente o más frecuente en los pacientes con trasplante de órgano sólido y generalmente es una infección que responde muy bien al tratamiento farmacológico, al tratamiento antiviral y a pequeños ajustes de la inmunosupresión. Sin embargo, es cierto que entre un cinco, un diez por ciento de los pacientes no tienen una buena respuesta a este tratamiento antiviral y podríamos empezar a plantearnos la posibilidad de que nos encontremos ante casos de citomegalovirus refractario o resistente. Qué entenderíamos o en qué situaciones tenemos que pensar que nos encontramos ante un citomegalovirus refractario? Pues cuando llevamos un tiempo de al menos seis semanas de tratamiento antiviral y un mínimo de dos semanas de tratamiento antiviral a dosis máximas toleradas? No. El cuadro clínico del citomegalovirus refractario puede ser muy variable y va desde pacientes asintomáticos con que responden muy bien al tratamiento antiviral y pequeños ajustes de la inmunosupresión, hasta pacientes que presentan enfermedad grave de órgano diana, generalmente, el sistema digestivo. Y aparte de esta afectación orgánica, bueno se ha visto en distintas series que tiene implicaciones en la morbilidad y en la mortalidad de los pacientes trasplantados. Cuando tenemos una sospecha clínica de un paciente con citomegalovirus refractario, tenemos que confirmarlo con el diagnóstico. Y esto se hace mediante técnicas genéticas para identificar mutaciones en determinadas enzimas que tienen los virus que les hace, digamos, menos susceptibles al tratamiento antiviral, que es un poco la base o la causa de esta resistencia del citomegalovirus a los antivirales. En general. No hay ensayos clínicos que nos indiquen hasta la fecha cuál de las distintas estrategias terapéuticas es mejor para enfrentarnos al citomegalovirus refractario. Entonces todo se basa en documentos de consenso de expertos y tenemos que trasladar todo eso al paciente individual en colaboración con los compañeros de microbiología y enfermedades infecciosas. En líneas generales, tenemos que actuar a varios niveles cuando nos encontramos ante un caso de citomegalovirus resistente, lo primero es intentar, en la medida que se pueda disminuir el grado de inmunosupresión, disminuir los fármacos inmunosupresores, puesto que al final el citomegalovirus es un es una infección oportunista. Es decir, cuanto mayores son los niveles de inmunosupresión, más fácil crece el citomegalovirus, con lo cual la primera medida es disminuir, si se puede el grado de inmunosupresión. El segundo aspecto es en la medida que se pueda intentar cambiar a otros fármacos inmunosupresores que tengan o que hayan demostrado a frente al citomegalovirus. Y en tercer nivel es intentar optimizar el tratamiento farmacológico, idealmente con el tratamiento de primera línea, que es el gran ciclo VIR aumentar las dosis de este fármaco. Y si nos encontramos ante casos confirmados de citomegalovirus refractario porque nos dicen en el test genético que existe una mutación genética para ese citomegalovirus que le hace existente, probablemente tengamos que usar u otros fármacos. Existen además nuevas líneas terapéuticas nuevas, nuevos fármacos que están que son experimentales y que han demostrado en pequeñas series un beneficio y ser eficaces frente al tratamiento de los casos con cierto mega lo virus refractario y que bueno, abren una ventana de oportunidad para el futuro si consiguen demostrar esa eficacia en ensayos clínicos más grandes. Y esto ha sido todo. Si tiene alguna pregunta más, no dude en consultar con su médico habitual. Nos vemos pronto. Le deseamos una rápida recuperación.
Hola, mi nombre es María y estamos en el Hospital Gregorio Marañón. En algunos casos puede que la infección activa por citomegalovirus no responda correctamente al tratamiento y se prolongue en el tiempo. Es lo que conocemos por infección refractaria, para comprender mejor por qué se produce y cómo será tratado por los médicos. Hablaremos con el doctor Carlos Ortiz, médico adjunto del servicio de cardiología clínica de este hospital. Quién nos resolverá algunas dudas? Me acompaña El citomegalovirus es la infección oportunista más prevalente o más frecuente en los pacientes con trasplante de órgano sólido y generalmente es una infección que responde muy bien al tratamiento farmacológico, al tratamiento antiviral y a pequeños ajustes de la inmunosupresión. Sin embargo, es cierto que entre un cinco, un diez por ciento de los pacientes no tienen una buena respuesta a este tratamiento antiviral y podríamos empezar a plantearnos la posibilidad de que nos encontremos ante casos de citomegalovirus refractario o resistente. Qué entenderíamos o en qué situaciones tenemos que pensar que nos encontramos ante un citomegalovirus refractario? Pues cuando llevamos un tiempo de al menos seis semanas de tratamiento antiviral y un mínimo de dos semanas de tratamiento antiviral a dosis máximas toleradas? No. El cuadro clínico del citomegalovirus refractario puede ser muy variable y va desde pacientes asintomáticos con que responden muy bien al tratamiento antiviral y pequeños ajustes de la inmunosupresión, hasta pacientes que presentan enfermedad grave de órgano diana, generalmente, el sistema digestivo. Y aparte de esta afectación orgánica, bueno se ha visto en distintas series que tiene implicaciones en la morbilidad y en la mortalidad de los pacientes trasplantados. Cuando tenemos una sospecha clínica de un paciente con citomegalovirus refractario, tenemos que confirmarlo con el diagnóstico. Y esto se hace mediante técnicas genéticas para identificar mutaciones en determinadas enzimas que tienen los virus que les hace, digamos, menos susceptibles al tratamiento antiviral, que es un poco la base o la causa de esta resistencia del citomegalovirus a los antivirales. En general. No hay ensayos clínicos que nos indiquen hasta la fecha cuál de las distintas estrategias terapéuticas es mejor para enfrentarnos al citomegalovirus refractario. Entonces todo se basa en documentos de consenso de expertos y tenemos que trasladar todo eso al paciente individual en colaboración con los compañeros de microbiología y enfermedades infecciosas. En líneas generales, tenemos que actuar a varios niveles cuando nos encontramos ante un caso de citomegalovirus resistente, lo primero es intentar, en la medida que se pueda disminuir el grado de inmunosupresión, disminuir los fármacos inmunosupresores, puesto que al final el citomegalovirus es un es una infección oportunista. Es decir, cuanto mayores son los niveles de inmunosupresión, más fácil crece el citomegalovirus, con lo cual la primera medida es disminuir, si se puede el grado de inmunosupresión. El segundo aspecto es en la medida que se pueda intentar cambiar a otros fármacos inmunosupresores que tengan o que hayan demostrado a frente al citomegalovirus. Y en tercer nivel es intentar optimizar el tratamiento farmacológico, idealmente con el tratamiento de primera línea, que es el gran ciclo VIR aumentar las dosis de este fármaco. Y si nos encontramos ante casos confirmados de citomegalovirus refractario porque nos dicen en el test genético que existe una mutación genética para ese citomegalovirus que le hace existente, probablemente tengamos que usar u otros fármacos. Existen además nuevas líneas terapéuticas nuevas, nuevos fármacos que están que son experimentales y que han demostrado en pequeñas series un beneficio y ser eficaces frente al tratamiento de los casos con cierto mega lo virus refractario y que bueno, abren una ventana de oportunidad para el futuro si consiguen demostrar esa eficacia en ensayos clínicos más grandes. Y esto ha sido todo. Si tiene alguna pregunta más, no dude en consultar con su médico habitual. Nos vemos pronto. Le deseamos una rápida recuperación.