Lo primero que hay que señalar es que no se es autista, se tiene autismo. Es un apunte que hace la psicóloga Isabel Menéndez Benavente para dejar claro que el autismo, o lo que es lo mismo, el Trastorno del Espectro Autista (TEA), es una condición.
Es importante saber que esta situación, que normalmente se detecta en la infancia, va a condicionar la vida de una persona, y que cuanto antes se diagnostique, mejor será el pronóstico.
Los signos de autismo en niños
Normalmente, a partir de los 18 meses de edad, ya se pueden ver signos de esta condición en el bebé. Hay detalles en los que conviene fijarse para detectar el autismo en niños, estos son algunos de ellos:
· No sonreír.
· No tener una expresión facial adecuada o común.
· No hacer un juego simbólico cuando lo tenga que hacer, por ejemplo, al jugar con los coches o las muñecas.
· No relacionarse con los demás, estar en su propio mundo.
· Hacer movimiento extraños y repetitivos, como el aleteo de las manos.
· No soportar los cambios, que les suponen una alteración o una reacción exagerada.
En el momento en el que se perciba cualquiera de estos signos, debemos llevar al niño a un especialista. De esta forma se podrán reconducir muchos hábitos. También es muy recomendable acudir a asociaciones. Por último, hay que intentar pensar en el hoy y no el futuro, porque eso puede angustiarnos o bloquearnos como padres.
Más información sobre el autismo en niños
Descubre más artículos sobre consejos de salud emocional. También puedes suscribirte a nuestro canal de salud emocional de YouTube para más información.