¿Cómo se trata la enfermedad venosa crónica?
La enfermedad venosa crónica es una patología inflamatoria, crónica y progresiva que debe tratarse desde la aparición de los primeros síntomas para prevenir su avance. El tratamiento debe ser integral y adaptado a la gravedad de la enfermedad.
Medidas generales para mejorar el retorno venoso:
Evitar permanecer de pie durante largos periodos.
Realizar ejercicio físico de forma regular, especialmente ejercicios que favorezcan la circulación sanguínea en las piernas.
Evitar el uso de ropa ajustada que pueda dificultar el retorno venoso.
Reposar con las piernas elevadas. En caso de úlcera activa, se recomienda elevar las piernas por encima del nivel del corazón durante la noche, manteniendo una diferencia de altura de unos 15 cm entre los pies y la cabeza.
Medias de compresión gradual
El uso de medias de compresión gradual es fundamental en el tratamiento de la enfermedad venosa crónica. Estas medias ejercen presión sobre las piernas, mejorando el flujo sanguíneo y aliviando los síntomas. La elección del tipo de media dependerá del grado de la enfermedad:
Compresión ligera (15-20 mmHg): Indicadas en los estadios iniciales de la enfermedad (C0s, C1).
Compresión normal (20-30 mmHg): Recomendadas en los estadios C2 y C3.
Compresión fuerte (30-40 mmHg): Necesarias en los estadios más avanzados (C4, C5, C6).
Tratamiento farmacológico
El tratamiento farmacológico se centra en aliviar los síntomas y frenar la progresión de la enfermedad.
Fracción flavonoide purificada y micronizada:
Este tratamiento, avalado por las guías clínicas internacionales, ha demostrado gran eficacia en el alivio de síntomas como:
Dolor
Pesadez
Sensación de hinchazón
Malestar funcional
Además, presenta un alto grado de evidencia en el tratamiento de úlceras activas. El alivio de los síntomas suele notarse en las primeras dos semanas de tratamiento, pudiendo prolongarse hasta 2-3 meses si es necesario.
Otras alternativas farmacológicas:
Es importante destacar que cualquier tratamiento farmacológico debe ser prescrito por un profesional médico.