La resonancia magnética es una prueba habitual para determinar el diagnóstico de esclerosis múltiple. Aquí puedes ver en qué consiste.
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Mejora de la Información al Paciente (MiPA)Esclerosis múltipleLa resonancia magnética es una prueba habitual para determinar el diagnóstico de esclerosis múltiple. Aquí puedes ver en qué consiste.
Vamos a explicar manera sencilla cómo se realiza una de las pruebas habituales de diagnóstico de la esclerosis múltiple: la resonancia magnética.
Esta es una prueba de imagen muy sencilla que permitirá a los médicos observar si existen lesiones en el cerebro y en la médula espinal.
Esto es lo primero que debes saber: el día que se te haya citado para la prueba, deberás acudir al hospital en ayunas de sólidos de dos horas y, si es posible, sin complementos metálicos como pendientes, piercings, etc., ni maquillaje. Además, deberás presentar tu documentación.
Si todo está en orden, a la hora de la cita te conducirán al lugar donde se realiza la resonancia.
La resonancia magnética es una herramienta clave en el diagnóstico de la esclerosis múltiple. Esta enfermedad afecta al sistema nervioso central y puede causar daño en el recubrimiento que rodea las células nerviosas, la mielina. La máquina de resonancia magnética permite ver si hay presencia de esas lesiones.
Lo primero que te pedirán es que te pongas una bata para que estés cómodo y que te tumbes en la máquina. Durante una resonancia se utiliza un campo magnético para obtener imágenes detalladas del cerebro y de la médula espinal, por eso es importante no traer objetos metálicos.
Una vez tumbado, el personal sanitario encargado de la prueba saldrá de la sala mientras la máquina hace su trabajo. Poco a poco te irás introduciendo dentro de la máquina, por lo que conviene que estés muy quieto.
Aunque puede parecer un poco agobiante, tienes que intentar relajarte. Ten en cuenta que el personal sanitario estará cerca de ti en todo momento y, cuando quieras darte cuenta, la prueba habrá terminado.
La resonancia magnética es crucial para el diagnóstico de la esclerosis múltiple, pero también sirve para descartar otras posibles causas de los síntomas que puedas estar padeciendo. Además, la resonancia puede proporcionar información clave sobre la gravedad de la enfermedad y ayudar a determinar la respuesta a los tratamientos específicos que se te puedan pautar en un futuro.
Después de la prueba, te vestirás y te podrás marchar a casa. Los médicos, a partir de este momento, interpretarán los resultados de la resonancia. Observarán si hay presencia de lesiones típicas de esclerosis múltiple en el cerebro o en la médula, que aparecerán como áreas brillantes en las imágenes obtenidas durante la prueba. Verán cuántas hay y dónde se encuentran exactamente, así como el patrón de las lesiones, lo que también puede proporcionar información sobre la esclerosis múltiple.
En caso de que hayas acudido para hacerte una resonancia de control, se comparará con las resonancias que te hayan hecho antes para valorar si han aparecido nuevas lesiones.
Es importante que sepas que esta prueba no es el único método que se utiliza para diagnosticar la esclerosis múltiple, ya que los resultados de la resonancia deben ser interpretados junto con tu historia clínica, los síntomas que tengas y otras pruebas.
No dudes en consultar con tu médico si tienes alguna pregunta.
desde aquí el Hospital Ramón y Cajal. Pronto te vamos a realizar una serie de pruebas para el diagnóstico de la esclerosis múltiple. Sé que cualquier prueba puede asustar un poco. Por eso te lo voy a explicar de manera sencilla. Vamos a ver paso a paso cómo se hace una de ellas La resonancia magnética, una prueba de imagen muy sencilla que permitirá que los médicos observemos si existen lesiones en el cerebro y en la médula espinal. Podrás disponer de este vídeo todas las veces que quieras. Estamos aquí para ayudarte. Esto es lo primero que debes saber. El día que te hayan citado para la prueba, deberás acudir al hospital en ayunas de sólidos de dos horas y ser posible sin complementos metálicos pendientes, piercings, etc. Ni maquillaje. Además, deberás presentar tu documentación. Si todo está bien, a la hora de la cita te conducirán al lugar donde se realiza la resonancia. La resonancia está situada en la planta del hospital o en la planta menos cuatro. La resonancia magnética es una herramienta clave en el diagnóstico de la esclerosis múltiple. Esta enfermedad afecta al sistema nervioso central y puede causar daño en el recubrimiento que rodea las células nerviosas, la mielina. La máquina de resonancia magnética es la que nos permite ver si hay presencia de esas lesiones. Lo primero que le pedirán es que exponga una bata para que esté cómodo y que se tumbe en la máquina. Durante una resonancia se utiliza un campo magnético para obtener imágenes detalladas del cerebro y de la médula espinal. Por ello te pedíamos que no trajeras objetos metálicos. Si te pediremos que te los quites antes de empezar la prueba. Una vez tumbado, el personal sanitario encargado de la prueba saldrá de la sala mientras la máquina hace su trabajo. Poco a poco te irás introduciendo dentro de la máquina, por lo que conviene que estés muy quieto. Aunque puede parecer un poco agobiante, tienes que intentar relajarte. Ten en cuenta que el personal sanitario estará cerca de ti en todo momento y cuando quieras darte cuenta, la prueba habrá terminado. La resonancia magnética, como hemos dicho, es muy importante para el diagnóstico de la esclerosis múltiple, pero también sirve para descartar otras posibles causas de los síntomas que estés padeciendo. Y no solo eso, la resonancia puede proporcionar información clave sobre la gravedad de la enfermedad. y ayudar a determinar la respuesta a los tratamientos específicos que se te puedan pautar en un futuro. Después de la prueba, te vestirás y te podrás marchar a casa. Los médicos, a partir de este momento, tendrán que interpretar los resultados de la resonancia para poder comunicártelo. Observarán si hay presencia de lesiones típicas de esclerosis múltiple en el cerebro y o en la médula, que aparecerán como áreas brillantes de las imágenes que se hayan obtenido durante la prueba. Verán cuántas hay y dónde se encuentran exactamente, así como el patrón de las lesiones, algo que también puede proporcionar información sobre la esclerosis múltiple. En caso de que hayas acudido para hacerte una resonancia de control, se comparará con las resonancias que te hayan hecho antes para valorar si han aparecido nuevas lesiones. Esperamos que ahora ya conozcas un poco mejor en qué consiste una resonancia magnética. Es importante que sepas que esta prueba no es el único método que se utiliza para diagnosticar la esclerosis múltiple, ya que los resultados de la resonancia deben ser interpretados junto con tu historia clínica, los síntomas que tengas y otras pruebas. No dudes en consultar con tu médico. Si tienes alguna pregunta, nos vemos pronto.