Las enfermedades inflamatorias mediadas por la inmunidad (EIMI) son cada vez más prevalentes en mujeres en edad fértil, entre 18 y 40 años. El estrés juega un papel importante como desencadenante y/o agravante de la sintomatología de estas enfermedades, por lo que aprender a manejar el estrés es uno de los aspectos más importantes a considerar para aumentar la calidad de vida del paciente.
Es importante que las mujeres informadas sobre el impacto de la enfermedad en la sexualidad, fertilidad, evolución del embarazo, lactancia, aspectos genéticos y transmisión a la descendencia. Hace unos años se pensaba que el deseo gestacional era incompatible con el tratamiento activo, pero actualmente gracias al enorme Arsenal terapéutico disponible y los estudios en práctica clínica, la gestación, la lactancia, la vacunación del recién nacido y las consultas de fertilidad son temas para abordar y dar respuesta desde los equipos multidisciplinares encargados del tratamiento de estas pacientes.
Fertilidad y embarazo en pacientes con EIMI
La fertilidad de los pacientes con una EIMI inactiva o en remisión es igual que la de la población en general. Aunque en algunas ocasiones concretas puede estar disminuida, como cuando la enfermedad está activa o existe desnutrición. En el caso de las mujeres con enfermedad de Crohn, especialmente en la colectomía total e ileostomía, si reciben tratamiento con corticoides o antiinflamatorios no esteroideos o han tenido tratamiento previo con ciclofosfamida. En el caso de los hombres, estar en tratamiento con sulfasalacina es importante.
Planificación del embarazo en pacientes con EIMI
Es importante que el embarazo en una mujer con una EIMI sea en la medida de lo posible programado, eligiendo el momento idóneo. Es decir, que la enfermedad esté inactiva en remisión o bien controlada.
Tratamiento para reproducción asistida
Las personas con una EIMI pueden someterse a tratamientos de fertilidad. Los diferentes fármacos empleados para el control de la actividad de la EIMI no tienen efectos sobre la congelación de óvulos o la eficacia de la reproducción asistida. Las hormonas que se utilizan como parte de la técnica no tienen ningún efecto adverso sobre la actividad de la EIMI.
En conclusión
El embarazo en mujeres con EIMI es un tema que preocupa a muchos pacientes. Sin embargo, con el manejo adecuado y un equipo médico multidisciplinario que trabaje en conjunto, es posible lograr una gestación exitosa. La planificación adecuada del embarazo, el control adecuado de la enfermedad, y la evaluación regular por parte del equipo médico son esenciales para garantizar el mejor resultado posible.