Vacunas y embarazo: destierra los falsos mitos
La administración de cualquier medicamento durante el embarazo está especialmente controlada con el objetivo de proteger tanto a la madre como al feto. No obstante, si bien se restringe el uso de diversos medicamentos, hay ciertas vacunas, como la de la gripe y la de la tosferina, que no solo pueden administrarse, sino que durante el embarazo. están especialmente aconsejadas
Vacuna contra la gripe durante el embarazo
En el caso de la gripe, la infección aumenta el riesgo de complicaciones durante el embarazo: en el primer trimestre, se ha asociado con un mayor riesgo de malformaciones cardiacas, labio leporino y defectos del tubo neural, mientras que durante el segundo y tercer trimestre, aumenta el riesgo de aborto y parto prematuro.
En cambio, la vacunación frente a la gripe se asocia a un menor riesgo de enfermedades respiratorias graves en hijos de madres vacunadas, incluida neumonía, y también a un menor riesgo de las complicaciones del embarazo mencionadas.
Durante el embarazo, se administra siempre la vacuna antigripal inactivada.
Vacuna frente a la tosferina durante el embarazo
La vacuna frente a la tosferina, basada en toxoides, también protege al recién nacido de padecer esta enfermedad durante los tres primeros meses de vida. Se recomienda la administración de la denominada triple bacteriana (tétanos-difteria-tosferina), incluso si la mujer ha sido previamente vacunada frente a la tosferina o ha pasado la enfermedad.
Información sobre otras vacunas
En cambio, la vacunación únicamente frente a tétanos y difteria solo se aconseja si la mujer gestante no tiene la pauta completa.
Por otro lado, en caso de que el nivel de riesgo lo recomendara, pueden utilizarse también las vacunas frente a la COVID-19 basadas en la tecnología del ARN mensajero.
Además de las vacunas específicamente recomendadas durante el embarazo, existen situaciones de riesgo que aconsejarían la administración de vacunas adicionales. Algunos ejemplos son:
· las vacunas inactivadas de la hepatitis A, en caso de posible exposición al virus
· contra la rabia, si se produce un contacto de riesgo, como una mordedura de animal;
· contra la poliomielitis, si se viaja a zonas endémicas.
También pueden estar indicadas otras basadas en polisacáridos, como la vacuna contra el meningococo y contra el neumococo, o basadas en proteínas recombinantes, como la vacuna frente a la hepatitis B.
Vacunas no recomendadas durante el embarazo
En cambio, hay otras vacunas que no están recomendadas o incluso se encuentran contraindicadas en esta etapa. Con carácter general, se desaconseja el uso de vacunas de virus vivos atenuados en el embarazo, como la triple vírica (sarampión-rubéola-parotiditis), la vacuna frente a la fiebre amarilla o la de la fiebre tifoidea oral.
La vacunación frente al virus del papiloma humano tampoco está recomendada durante el embarazo. Los datos disponibles no indican un aumento del riesgo de malformaciones ni efectos nocivos sobre el embarazo ni el desarrollo embrionario ni fetal tras la administración de esta vacuna, pero se requiere de datos más exhaustivos para concluir sobre la conveniencia de su administración a mujeres embarazadas.