La prednisolona es un corticoide utilizado en el tratamiento de diversas enfermedades inflamatorias y autoinmunes tanto en adultos como en niños mayores de un mes. A continuación, detallamos sus diferentes formas de administración y aplicaciones terapéuticas. Se administra por vía oral para tratar condiciones como:
Este medicamento también puede administrarse en forma de colirio y pomada. En forma de colirio, se utiliza para tratar afecciones inflamatorias oculares en adultos, como la queratitis.
En cambio, en forma de pomada , la prednisolona la podemos encontrar en la pomada antihemorroidal, en la que ejerce un efecto antiinflamatorio, antipruriginoso, es decir, reduce el picor y vasoconstrictor. Además, se usa en combinación con otros fármacos en forma de pomada nasal para tratar la congestión, la inflamación y pequeñas heridas.
Para la administración oral, la prednisolona está disponible en concentraciones de 3 mg/ml y 7 mg/ml, con la dosis variando según la condición tratada y el peso del paciente en el caso de los niños.
Las formulaciones de prednisolona en solución oral, colirio y pomada nasal requieren prescripción médica, mientras que la pomada rectal con prednisolona puede adquirirse sin receta.
Posibles efectos de la prednisolona
Cuando se utiliza por vía oral, la prednisolona puede causar efectos adversos como retención de agua, aumento de la glucosa en sangre y enlentecimiento en la cicatrización de heridas, especialmente en tratamientos crónicos.
El uso de prednisolona como colirio puede ocasionar irritación, visión borrosa o aumento de la presión intraocular.
Por último, cuando se utiliza como pomada, los efectos adversos son poco frecuentes si se siguen las indicaciones del prospecto. Sin embargo, dosis altas o tratamientos prolongados pueden conducir a efectos similares a los de la vía oral.