Primeras tomas de lactancia materna: consejos para un inicio exitoso
Iniciar la lactancia materna puede ser un momento emocionante pero también desafiante tanto para la madre como para el bebé. Es fundamental contar con información y apoyo para asegurar un comienzo exitoso en esta etapa tan importante.
El contacto piel con piel: la clave para un buen comienzo
El contacto piel con piel inmediato después del parto es esencial para favorecer el inicio de la lactancia. Este contacto, que consiste en colocar al bebé desnudo sobre el pecho de la madre, permite al recién nacido:
Regular su temperatura corporal: El contacto con la piel de la madre ayuda al bebé a mantener una temperatura estable.
Estabilizar su frecuencia cardíaca y respiratoria: La cercanía con la madre proporciona al bebé una sensación de seguridad y calma, lo que se traduce en una mejor regulación de sus funciones vitales.
Colonizar su intestino con bacterias beneficiosas: El contacto con la piel de la madre facilita la transmisión de bacterias beneficiosas al bebé, lo que contribuye al desarrollo de un sistema inmunitario saludable.
Encontrar el pecho de forma instintiva: El instinto de succión del bebé se ve favorecido por el contacto piel con piel, lo que le permite encontrar el pecho de la madre de manera natural.
Paciencia: la mejor aliada durante las primeras tomas
Es importante recordar que el bebé está aprendiendo a succionar, por lo que es fundamental tener paciencia durante las primeras tomas. Al principio, las tomas pueden ser más largas e irregulares a medida que el bebé se familiariza con el proceso.
Buscando ayuda y apoyo
Contar con el apoyo de profesionales de la salud, como matronas o asesoras de lactancia, puede ser de gran ayuda para resolver dudas y superar cualquier dificultad que pueda surgir durante el inicio de la lactancia materna.
Recuerda que cada experiencia de lactancia es única. Lo importante es buscar información, apoyo y confiar en tu instinto maternal para disfrutar de este proceso tan especial.