A menudo los niños se quejan de dolor. El pediatra Jesús Garrido explica que lo primero que hay que tener en cuenta es que el dolor actúa como una señal de alarma. Por ello, solo debe tratarse cuando se sabe cuál es la causa. Es importante, porque por ejemplo, cuando un niño tiene un dolor continuo e intenso de barriga pueden ser muchas cosas, entre ellas, apendicitis. Si tratamos el dolor sin saber la causa, al niño le dolerá menos, pero irán pasando los días y el problema seguirá empeorando.
Que medicamentos utilizar en niños para el dolor
Hay diferentes tipos de dolor y por tanto, diferentes prácticas y medicamentos para hacer frente a ellos. Garrido empieza por comentarnos que existen muchos dolores leves que padecen nuestros hijos que se ‘curan’ solamente con cariño, con un abrazo. Pero evidentemente hay casos donde el dolor es más agudo y que valerse de medicamentos.
Los medicamentos básicos para el dolor son el ibuprofeno, el matamizol y el paracetamol. Los dos primeros, además de aliviar el dolor, tienen un efecto anti inflamatorio. Es bueno aplicarlo cuando estamos ante dolores de dientes, oídos o aquellos producidos por un golpe. Pero cuando el dolor no reviste ni lleva consigo una inflación entonces el abanico ya se abre también al paracetamol. En esos casos podemos utilizar el que mejor nos venga de los tres. Hay personas a las que les funciona mejor un medicamento y otras a las que le funciona mejor con otros no es que haya uno que sea el mejor.
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