Alrededor de tres millones de españoles están infectados por el Virus del Papiloma Humano

La promiscuidad sexual supone, según los expertos que forman el Foro VPH, uno de los principales factores de riesgo para el contagio de la enfermedad. Su alta incidencia hace que la infección genital por VPH sea una de las enfermedades de transmisión sexual de carácter vírico más frecuente en los países occidentales.

Estos datos fueron aportados durante la presentación del primer documento consensuado sobre VPH en España. El documento la sitúa entre las enfermedades de transmisión sexual de carácter vírico más frecuentes hoy, afectando a entre dos y tres millones de personas en nuestro país. Según el doctor Xavier Bosch, miembro del foro y Jefe de Servicio de Epidemiología y Registro del Cáncer del Instituto Catalán de Oncología de Barcelona, «en España se estima que el VPH afecta entre un cinco y un diez por ciento de la población adulta».

El Foro VPH ha sido creado para mejorar el conocimiento del VPH. «Uno de los mayores intereses de la investigación en VPH», explican sus expertos en un comunicado, «reside en la asociación etiológica, caracterizada de forma reciente, de algunas de las infecciones por virus del papiloma humano con el cáncer de cérvix y otros tumores del tracto anogenital masculino y femenino», sobre el que se centrarán sus esfuerzos.

Existen dos tipos de VPH en función de su asociación a cáncer: uno de bajo riesgo, que con frecuencia se manifiesta en forma de verrugas genitales, y otro de alto riesgo que se encuentra en la casi el 98 por ciento de los casos diagnosticados de lesiones precancerosas y cáncer de cuello de útero.

La enfermedad afecta tanto a mujeres como a hombres, pero son las mujeres infectadas las que tienen peor capacidad de respuesta inmunológica, por lo que existe una mayor persistencia de la lesión. El tabaco, la exposición hormonal por toma de anticonceptivos o embarazo, la deficiencia nutricional o las infecciones del tracto genital inferior son algunos cofactores que favorecen su progresión a cáncer.

Según los expertos del Foro VPH, entre las medidas preventivas para paliar esta patología encontramos «la educación sanitaria, no sólo de la población, sino también de los profesionales sanitarios que deben actualizar su formación científica, la actualización de las nuevas opciones preventivas aportadas por la tecnología de detección viral y la mejora de las actuaciones médicas».

Tratamiento de la infección por VPH

En la actualidad existen dos grupos de tratamientos para las verrugas genitales: tratamientos farmacológicos (Interferón, Podofilino, Podofilotoxina, principalmente) y tratamientos físicos (los más comunes, la crioterapia, el láser de dióxido de carbono y la escisión quirúrgica).

La mayor parte de los tratamientos se basan en la extirpación o destrucción de las verrugas genitales, lo que sin embargo no garantiza la eliminación del virus, que puede afecta a las células de los epitelios vecinos, dificultando su erradicación.

Las principales investigaciones en este momento se llevan a cabo desarrollando nuevas vacunas, tanto profilácticas como terapéuticas. Estas vacunas «podrían prevenir la mayoría de cánceres cervicales y, quizás, una fracción indeterminada de otros tumores», según los miembros del Foro. La evaluación de las primeras vacunas profilácticas contra algunos tipos de VPH se espera que lleguen en cinco años. Lo que da la idea de la necesidad de promover mientras tanto la prevención. Como mensaje para la población, este grupo de expertos recuerda que evitar la promiscuidad sexual y usar el preservativo, son los únicos medios para prevenir este virus como el resto de enfermedades de transmisión sexual.

Consenso del Foro VPH

El foro VPH fue fundado a principios de este año y tiene cinco miembros permanentes de diferentes especialidades médicas procedentes de todo el estado, como la dermatología, la obstetricia y ginecología y la oncología. Actualmente trabajan en un documento de consenso multidisciplinar que abordará los aspectos clave de la patología.

El principal objetivo del documento es profundizar sobre los aspectos epidemiológicos de la infección, su amplio espectro clínico, la complejidad terapéutica y las frecuentes recaídas que se producen en los pacientes afectados.