Atención coordinada al paciente con demencias

El Alzheimer y otras demencias, fundamentalmente las relacionadas con la edad, están siendo objeto de atención por parte de las sociedades médicas.

Si hace apenas dos meses la Sociedad Española de Psiquiatría presentaba un manual de consenso para el tratamiento del anciano con demencias, hoy, esta misma sociedad, ha presentado un trabajo conjunto realizado con la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (SEMFYC), la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología y la Sociedad Española de Neurología. La obra se titula Atención coordinada al paciente con demencia y persigue facilitar al profesional médico de cada una de estas especialidades una documentación accesible que pueda consultar con facilidad.

El coordinador de la obra, el doctor Gómez de la Cámara, de la Unidad de Investigación del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid, ha comentado que «las sociedades científicas que colaboran en esta iniciativa son conscientes de la problemática interdisciplinaria y compleja de la atención al paciente con demencia y todas aportan, desde sus respectivas ópticas, el conocimiento y la experiencia contrastada que mejor puede contribuir a la atención del paciente».

«Los pacientes con demencia presentan fases, matices, formas y situaciones particulares que es necesario conocer e identificar y que han sido recogidas en el libro de forma útil y original», dice el doctor Gómez de la Cámara. Se pretende además que este manual sea la base para la colaboración de las cuatro sociedades en el futuro, ya que, según los expertos que han trabajado en su elaboración, la atención al paciente con demencias en España no es la ideal. Prueba de ello, han resaltado los autores, es la vía muerta en que se encuentra el Plan Nacional sobre Alzheimer, que tantas expectativas generó al nacer y sobre el que las autoridades sanitarias no han vuelto a trabajar.

Calidad asistencial

El concepto sociosanitario de la demencia no está en España en su nivel óptimo de coordinación ni de prestación de servicios, a juicio de los autores del libro.

En el manual se dedica un capítulo a delimitar qué es calidad asistencial en este campo, que debe basarse, según sus criterios, en una aproximación holística, en una implicación económica y en una base de conocimientos científicos.

Para medir la calidad asistencial es necesario utilizar criterios de estructura, proceso y resultados. En cuanto a estos últimos es fácil medir los resultados negativos, pero los positivos presentan dificultades en el caso de enfermedades crónicas o de larga duración. Para ello es necesario utilizar perspectivas epidemiológicas y utilizar esquemas comparativos. La satisfacción del paciente se presenta como un factor indudable a la hora de medir la calidad asistencial y está directamente relacionada con el grado de cumplimiento de sus expectativas.