Clonación de un embrión humano

27Nov. 01

El estudio, publicado en el Journal of Regenerative Medicine, "proporciona la primera prueba de que células humanas reprogramadas pueden suministrar tejidos para trasplante", proclama ACT en un comunicado de prensa a través de su página web (www.advancedcell.com). Asimismo, Robert Lanza, vicepresidente de ACT, aclara en dicha nota de prensa que "nuestro objetivo no es crear seres humano clónicos, sino crear terapias salvavidas para un amplio abanico de enfermedades humanas, que incluyen diabetes, embolias, cáncer, sida y enfermedades neurodegenerativas como Parkinson y Alzheimer".

Producir tejidos para trasplantes a partir de células extraídas de embriones es una de las vías de investigación para conseguir estos objetivos. Los científicos intentan reproducir en el laboratorio la transformación de las células del embrión en los distintos tejidos del cuerpo humano. ACT explica en su comunicado que ha realizado estudios sobre «dos métodos para manufacturar este tipo de células». Uno de los métodos consiste en coger un óvulo no fertilizado y hacer que se divida en el laboratorio, obteniendo un cúmulo de células muy parecidas a un embrión. Esta técnica es conocida como partenogénesis y su inconveniente radica en que las células que se obtienen no se desarrollan como un embrión.

El otro método consiste en extraer el material genético de la célula adulta e introducirlo en un óvulo, al igual que se hizo con la oveja «Dolly». En este caso, se ha utilizado el material genético de una célula de la piel y el embrión se ha desarrollado hasta tener seis células. En este sentido, Josep Egózcue, catedrático de Biología Molecular de la Universidad Autónoma de Barcelona, asegura que el hecho de estimular un óvulo no fecundado para que se divida «ya lo planteamos nosotros hace muchos años y hay una tesis presentada hace 10 años que utiliza esta metodología».

A pesar de que la noticia apareció el pasado 25 de noviembre en los medios de comunicación, los autores de la investigación explican en el comunicado que, después de varios meses de intentos, el pasado 13 de octubre consiguieron los primeros embriones humanos. Estos embriones fueron producidos mediante la técnica de «trasplante nuclear» (clonación). «Tras muchos meses de intentos, el 13 de octubre de 2001 conseguimos ver en los microspcopios de nuestro laboratorio pequeñas bolas de células divididas. Aunque aparentemente parecían insignificantes, el resultado resultó precioso porque lo que allí había, gracias a nuestro trabajo, eran los primeros embriones producidos mediante técnicas de clonación», explica el equipo de investigadores ACT en la página de información especializada Scientific American.

Reacciones ante la noticia

Ante el anuncio Advanced Cell Technology, Gonzalo Herranz, secretario de la Comisión Central de Deontología de la OMC, ha declarado que las mismas objeciones de índole moral que cabe hacer a la clonación con fin reproductivo valen también a la que tenga exclusivamente un objetivo terapéutico. «Se crean seres humanos para limitarlos a la condición de simples complejos celulares al servicio, no de otros sino de la persona que dona el nucleo», opinina Herranz.

Por su parte, la Cámara de Representantes de Washington votó en agosto a favor de una ley que limitaba la investigación con embriones humanos clonados. El Senado aún no se ha pronunciado a la espera de analizar los pros y los contras de este tipo de investigación, pero al conocerse la noticia, varios senadores de Washington, que están desarrollando las leyes que deben regular la clonación de Estados Unidos, se mostraron ayer preocupados por las implicaciones de la investigación de Advanced Cell Technology.

También el Vaticano reaccionó declarando que «la clonación es un hecho moralmente censurable», según palabras de monseñor Mauro Cozzoli. «Que lo hayan hecho con fines terapéuticos agrava el juicio, ya que no se puede crear un individuo para después suprimirlo en beneficio de otro», añadió.