Diagnóstico: reacción alérgica o angioedema por bradicinina

Una inflamación que simula una alergia podría esconder el angioedema, una patología potencialmente mortal. Según indica los expertos, muchos clínicos suelen confundir esta patología con cuadros alérgicos idiopáticos hasta el punto de que muchos de estos afectados han sufrido operaciones innecesarias de apendicitis, ovarios o traqueotomías. Los expertos estiman que esta patología afecta a 75.000 personas en Europa, de los cuales unos 1.500 son españoles y sólo el 45 por ciento de ellos están correctamente diagnosticados.

El Dr. Álvaro Moreno, alergólogo del Hospital Nuestra Señora del Prado en Talavera de la Reina y especialista en el estudio de esta patología, explica que un ataque de angioedema por bradicinina puede provocar la inflamación de diversas partes del cuerpo como, por ejemplo, espalda, intestinos, genitales, cabeza o extremidades.

«Aquellas inflamaciones que tienen lugar en la cara, como hinchazón de párpados o labios, son las más impactantes por la deformidad que conllevan. Pero las crisis más graves son las que comprometen la vía aérea, ya que un edema de glotis puede llegar a provocar la asfixia del paciente. En muchos casos estos pacientes tardan en ser diagnosticados correctamente hasta más de veinte años y piensan que sufren algún tipo de alergia desconocida, incluso son sometidos de forma errónea a cirugías de apéndice, ovarios o traqueotomía por los propios facultativos», señala.

En caso de ataque grave es imprescindible recurrir a la medicación de rescate que alivie la inflamación. Recientemente, los investigadores europeos han descubierto que la bradicinina -una proteína que se encuentra presente en todos los procesos inflamatorios- es la causante de los edemas y provoca que se acumule líquido en vasos, tejido cutáneo y en la capa mucosa profunda. Desde mayo de 2009 está disponible en España el acetato de icatibant -por el momento, el único principio activo que actúa como antagonista de la bradicinina en inyección subcutánea-. «Este principio activo bloquea la formación del edema en una media de 48 minutos, lo que supone una revolución en el rápido abordaje de la enfermedad», explica el Dr. Moreno.

Según señalan los expertos esta patología afecta a unos 75.000 europeos, de los cuales unos 1.500 se calcula que son españoles y un 50 por ciento de ellos son tratados como alérgicos idiopáticos (no saben exactamente qué les provoca alergia). Sólo un 45 por ciento de ellos está correctamente diagnosticado de su enfermedad, según el Doctor Marcos Cicardi, Jefe de Medicina Interna del Hospital Luigi Sacco de Italia.

En caso de ataque grave, la autoadministración del tratamiento podría salvar la vida del paciente

Este 45 por ciento de pacientes que sí están correctamente diagnosticados reclama los mismos derechos que otros enfermos como los diabéticos o hemofílicos a los que se les permite la autoadministración de sus medicamentos en situaciones de crisis grave. Tal y como explican los propios clínicos, estas reclamaciones son lógicas pues, actualmente, los afectados por estas crisis de angioedema no cuentan con un respaldo legal a la hora de tener sus medicaciones de rescate en sus domicilios. «Si los pacientes afectados por angioedema pudieran acceder a medicación de rescate se podría llegar a salvar un 25 por ciento de ellos. Se evitarían muchos fallecimientos», señalan los alergólogos.

La Dra. Teresa Caballero, alergóloga del Hospital Universitario La Paz, es rotunda: «un paciente afectado por angioedema debería tener los mismos derechos que otro paciente cuya vida corre un gran riesgo si no accede a tiempo a su medicación, como ocurre con los diabéticos o hemofílicos. Sin embargo, actualmente, en España los pacientes afectados por este tipo de angioedemas no pueden autoadministrarse su terapia de rescate», señala la Dra. Caballero.

Un problema de falta formación

Es clave que los médicos de urgencias sepan reconocer una crisis de angioedema a tiempo para evitar complicaciones y consecuencias fatales en el caso de que la inflamación ataque la vía respiratoria, denuncia Cristina Rial, que perdió a su marido por esta enfermedad y es madre de un niño afectado.

Un diagnóstico correcto y la administración de un tratamiento adecuado puede salvar la vida de estos pacientes cuyas crisis inflamatorias no responden ni a corticoides, antihistamínicos o adrenalinas. Por este motivo, también los doctores que han tratado a pacientes de angioedema denuncian la necesidad de formar a los profesionales sanitarios de urgencias en el diagnóstico y tratamiento de esta patología para que no la confundan con un ataque de alergia idiopática o desconocida.

Angioedema por bradicinina

Los angioedemas por bradicinina agrupan los angioedemas hereditarios, los angioedemas estrógeno-dependientes, los angioedemas en pacientes tratados con antihipertensivos (IECAS), los angioedemas adquiridos y otros angioedemas de origen idiopático.

Angioedemas Hereditarios. En estos casos se produce en el sujeto afectado un déficit o problemas de funcionamiento de una proteína denominada inhibidor de la esterasa C1. En este grupo también se encuentran los pacientes que tienen los niveles de C1 normales (pero ésta proteína no hace su función correctamente) y presentan niveles bajos de C3 y C4. Precisamente, este segundo grupo, denominado angioedemas hereditarios tipo II, son los que más confunden al facultativo y suele ser diagnosticado erróneamente como una alergia.

Los angioedemas estrógeno-dependientes se producen en su mayoría en mujeres con niveles normales del inhibidor esterasa C1 y se originan cuando se administran estrógenos como, por ejemplo, la píldora – o en determinadas épocas de la vida como puede ser en los embarazos, en la pubertad o en la menopausia.

También se pueden producir angioedemas mediados por bradicinina en algunos pacientes que son tratados con antihipertensivos (IECAS) , Inhibidores de la Enzima Convertidora de la Angiotensina. Los expertos en angioedema aclaran que el número de pacientes afectados por angioedema por administración de IECAS puede llegar a un cinco por ciento. Este grupo es muy elevado porque los IECAS pueden llegar a producir una elevación en suero de la bradicinina.

Los angioedemas adquiridos se pueden producir en enfermos que padecen algún tipo de tumor o, linfoma no Hodgkin o enfermedades autoinmunes o por comportamiento de anticuerpos.

Los angioedemas idiopáticos , también cuentan con una producción anormal de bradicinina. Estos se pueden producir por etiologías diversas y su causa no se puede llegar a identificar.