El atracón de bebida daña el cerebro de lo jóvenes

El 'Binge Drinking' o 'atracón de bebida' ocasiona graves consecuencias en la salud de los adolescentes provocando daños cerebrales y alteraciones que afectan a la memoria, la capacidad intelectual o de aprendizaje de los jóvenes.

El ‘Binge Drinking’, que supone un consumo de 60 gr en varones y 40 gr en mujeres durante un intervalo temporal de dos horas, produce alteraciones estructurales y funcionales en el cerebro de jóvenes y adolescentes.

La investigación de FEPAD llevada a cabo sobre esta materia deja la evidencia de graves consecuencias como daños en el cerebro que persisten con el tiempo. Así, una de las zonas afectadas son los lóbulos frontales, ocasionando peor rendimiento en procesos de atención, razonamiento, planificación, toma de decisiones, control comportamental, etc. Además, afecta al hipocampo, que es la zona relacionada con la memoria. De este último aspecto cabe añadir que a los dos años de seguimiento persisten las dificultades en tareas cognitivas, incluso entre jóvenes exconsumidores.

Por ello, la toxicidad del etanol puede alterar la plasticidad cerebral y modificar de forma irreversible ciertas regiones cerebrales en el adolescente. Según han indicado expertos en la materia, los sujetos que comienzan a beber a una edad temprana tienen mayor riesgo de sufrir problemas de adicción al alcohol cuando son adultos.

Por otro lado, respecto al policonsumo de alcohol junto con otras drogas, a través de investigaciones apoyadas desde FEPAD se observa que la combinación de alcohol y éxtasis, reduce la sensación de embriaguez de alcohol y aumenta la euforia del éxtasis. Se incrementan la presión arterial, frecuencia cardiaca y temperatura respecto al éxtasis solo. La combinación de estas dos sustancias tiene graves consecuencias porque genera una falsa sensación de ejecución adecuada que tiene importantes implicaciones en el funcionamiento motor en general del consumidor, según las mismas fuentes.

Estas han sido algunas de las conclusiones que resaltan los expertos que se han dado cita en la I Jornada de Divulgación científica La ciencia al alcance de todos organizada por Fundación para el Estudio, Prevención y Asistencia a las Drogodependencias, FEPAD, en colaboración con la Universidad CEU Cardenal Herrera, según ha informado la Generalitat en un comunicado.

La cocaína modula el sistema emocional

Otra de las problemáticas abordadas en la Jornada es la adicción a la cocaína y las consecuencias en salud mental para la persona adicta. Según los expertos, la última investigación sobre Neuroimagen y Neurobiología de la Drogadicción: Cocaína , evidencia que esta droga modula el sistema emocional del consumidor adicto hasta el punto de perder interés por actividades placenteras cotidianas.

En este sentido, ‘el sistema de la recompensa’ es un sistema natural por el que una persona tiende a repetir una acción que le resulta placentera o gratificante, como puede ser ir al cine o hacer deporte.

Sin embargo, se ha comprobado que en pacientes adictos a la cocaína ese sistema de recompensa está deteriorado, de manera que la persona con adicción a esta sustancia canaliza ese deseo de repetir una acción placentera únicamente al hecho de consumir esta droga perdiendo interés por el resto de estímulos naturales o placenteros.

Todo ello explica conceptos muy relacionados con las personas adictas a la cocaína como son la impulsividad o deseo intenso de consumir esa droga.