Empieza un estudio pionero sobre el olfato de la población

El Hospital Clínico Universitario de Barcelona y el Hospital Municipal de Badalona han puesto en marcha un estudio para evaluar la capacidad olfativa de los habitantes de Catalunya. El estudio sólo tiene un precedente a nivel mundial. A largo plazo, sus resultados podrían ayudar a diseñar fármacos de administración por vía olfativa para enfermedades como el Alzheimer o el Parkinson.

El olfato está ligado a la respiración y ofrece al individuo una información constante sobre el mundo que le envuelve. Permite conocer de forma intuitiva lo que emana de un ser, de un objeto, de un lugar o una situación. Y es un instrumento sutil de conocimiento estrechamente vinculado a la memoria. Un olor puede causar satisfacción, alegría o ternura evocando instantáneamente emociones del pasado. Pero también puede provocar miedo o angustia que, inexplicablemente, nos pueden afectar durante largo tiempo. Y, sin embargo, siendo el sentido más antiguo en la evolución del cerebro, es el más desconocido.

Así lo entienden los artífices del estudio OLFACAT, que tiene como objetivo conocer el olfato de la población catalana y qué factores le afectan. De forma científica, el estudio intentará determinar si la edad, el sexo, el tabaco, la contaminación, el vivir en una zona de mar o de montaña; son factores que afectan directamente a la pérdida de olfato. Y se pretende determinar si la sinusitis o las alergias, los accidentes o los cambios hormonales en las mujeres, pueden alterar la capacidad olfativa.

La investigación no tiene precedente en España y sólo se conoce un estudio similar realizado por National Geographic en 1996 entre sus lectores. De forma parecida, el estudio se ha llevado a cabo difundiendo encuestas y muestras de olores entre los lectores de El Periódico de Catalunya. Los artífices del estudio esperan que contesten unas 15.000 personas y creen que podrían presentar los primeros resultados en los próximos 4-6 meses.

«El olfato tiene mucha relación con la salud», sentencia el doctor Joaquim Mullol, coordinador de la Unidad de Rinología del Hospital Clínico de Barcelona y co-director del estudio; «lo vamos adquiriendo a lo largo de la vida, se estabiliza entre los 20 y los 40 años y después, progresivamente, se va perdiendo de forma fisiológica, como se pierde la vista», añade.

Sin embargo, existen patologías que afectan al olfato, como inflamaciones de tipo alérgico, sinusitis, infecciones víricas, los accidentes, las enfermedades neurodegenerativas. «Por ello, el olfato es importante no sólo en el diagnóstico precoz de enfermedades como el Alzheimer o el Parkinson, también porque en el futuro quizás podamos administrar muchos fármacos al sistema nervioso por vía olfativa», explica este especialista.

Su compañero y co-director del estudio, el doctor Josep de Haro, médico adjunto del Hospital Municipal de Badalona, lamenta que «hayamos olvidado el gran valor que tiene el olfato para el ser humano. Nos da la sensación de que la vista y el oído lo solucionan todo, pero no es así. El olfato puede aportarnos una gran cantidad de información, pero no estamos educados para utilizarlo», afirma este especialista, quien espera que este estudio «anime a la población a dar más importancia al olfato».

Administración de fármacos por vía olfativa

La vía olfatoria es una vía de administración de fármacos que se está estudiando mucho últimamente. «Hay productos químicos que se absorben mejor por la zona olfativa y que pueden pasar así directamente al cerebro», explica el doctor Mullol. Por ello, se están probando sustancias «que pueden ser tratamientos para enfermedades neurodegenerativas o del sistema nervioso, que sean administradas por vía olfativa».

Sin embargo, es necesario estudiar si las personas que tienen el olfato alterado, también tienen alterada está vía de absorción. «Es todo un mundo para empezar a explorar, que se ha investigado poco hasta ahora pero con una gran potencialidad», añade este especialista. Una parcela de conocimiento que este estudio ahora en marcha quiere ayudar a llenar.