Estrategia NAOS contra la obesidad

14Feb. 05

España presenta una de las tasas de obesidad infantil más altas de Europa: el 16 por ciento de los niños entre seis y 12 años es obeso. Ante esta situación, el Ministerio de Sanidad y Consumo ha puesto en marcha la estrategia NAOS para prevenir la obesidad, mejorar los hábitos alimenticios y fomentar la práctica de ejercicio físico.

La Ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, ha presentado recientemente la Estrategia NAOS (Nutrición, Actividad Física y Prevención de la Obesidad), cuya principal finalidad es mejorar los hábitos alimenticios e impulsar la práctica regular de la actividad física entre todos los ciudadanos, poniendo especial atención en la prevención durante la etapa infantil y juvenil. En su elaboración han participado ocho grupos de expertos coordinados por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria, más de 80 asociaciones, organismos públicos y privados y sociedades científicas.

Para la ministra, este documento «no va contra nada porque no habla de alimentos buenos o malos, sino que apuesta por una vida rica, plural y divertida».

Esta iniciativa pretende ser un marco en el que se encuadren intervenciones destinadas a promover una nutrición saludable y a fomentar la práctica del ejercicio físico. Un marco que recoja las iniciativas que están ya en marcha y que establezca alianzas y acuerdos con todos aquellos actores que contribuyan a la reducción de la prevalencia de la obesidad en nuestro país.

La obesidad en España

En nuestro país uno de cada dos adultos presenta un peso superior al razonable, pero aún son más preocupantes las cifras de obesidad y sobrepeso infantil y juvenil. Casi el 14 por ciento de la población entre dos y 24 años es obesa y el 26,3 por ciento padece sobrepeso.

La prevalencia de la obesidad se asocia cada vez más con las principales enfermedades crónicas de nuestro tiempo, como enfermedades cardiovasculares, hipertensión, ciertos tipos de cáncer o diabetes, entre otras. De hecho, de los diez factores de riesgo identificados por la Organización Mundial de la Salud como claves para el desarrollo de enfermedades crónicas, cinco están estrechamente relacionados con la alimentación y el ejercicio físico. Además de la obesidad, se citan el sedentarismo, hipertensión arterial, hipercolesterolemia y consumo insuficiente de frutas y verduras. De esta forma, la obesidad puede reducir la esperanza de vida de una persona hasta en diez años. Además, supone una elevada carga económica para los sistemas de salud.

Las causas

Las cifras tan altas de obesidad se deben principalmente a los cambios en el estilo de vida y en concreto a la pérdida de la alimentación tradicional y al sedentarismo.

Los jóvenes cada vez se están alejando más de la dieta mediterránea porque ha aumentado el consumo excesivo de productos cárnicos, lácteos, bollería y bebidas carbonatadas al tiempo que ha disminuido la ingesta de pescado, frutas, verduras y cereales. Además, es preocupante que el ocho por ciento de los niños españoles acuden al colegio sin haber desayunado cuando está demostrado que omitir esta comida aumenta el riesgo de padecer obesidad.

Todo esto se agrava además por una tendencia creciente al sedentarismo en las actividades lúdicas, donde la práctica de ejercicio se ha sustituido por pasar horas delante de la televisión o del ordenador. Los niños españoles pasan una media de dos horas y 30 minutos al día viendo la televisión y media hora adicional jugando con videojuegos o conectados a Internet. Además, España es uno de los países europeos donde se practica menos deporte.

Atacar el problema

Los objetivos principales que se van a desarrollar a través de la Estrategia NAOS son fomentar políticas y planes de acción destinados a mejorar los hábitos alimentarios y a aumentar la actividad física entre la población, a la vez que sensibilizar del impacto positivo que estas prácticas tienen para su salud; colaborar con las empresas del sector alimentario para promover la producción y distribución de productos que contribuyan a una alimentación más sana y equilibrada; y sensibilizar a los profesionales del SNS para impulsar la detección sistemática de la obesidad y el sobrepeso, y adoptar una actitud activa en su prevención.

La elaboración de este documento surge como respuesta a la petición que lanzó la Organización Mundial de la Salud (OMS) durante la 57º Sesión de que cada país desarrollara una estrategia en sus territorios para luchar contra la obesidad a nivel mundial. En el caso de España, la OMS aceptó que pilotara una estrategia adaptada a nuestra realidad, la Estrategia NAOS que podría servir de modelo a países de nuestro entorno.

El problema de la obesidad debe tener un abordaje multidisciplinar, y por eso la Estrategia recoge una serie de ámbitos de intervención, basados en recomendaciones, acuerdos voluntarios, autorregulación y, en algunos casos, en iniciativas normativas. Estos ámbitos son el familiar y comunitario, el escolar, el empresarial y el sanitario.

Entre las medidas diseñadas para el ámbito familiar está previsto realizar campañas informativas y acuerdos con los medios de comunicación y con las empresas de ocio y entretenimiento para fomentar hábitos saludables de alimentación y de práctica de ejercicio físico.

En el ámbito escolar se pretende incluir en el currículo académico conocimientos y habilidades relativos a la alimentación y la nutrición; promover la práctica frecuente de actividad física y deporte en la edad escolar, ampliando el horario de uso de las instalaciones deportivas escolares con programas de actividades deportivas durante los fines de semana; así como controlar los mecanismos de funcionamiento, evaluación y seguimiento de los comedores escolares.

Las acciones en el ámbito empresarial , mediante la firma de seis convenios, distintas asociaciones se comprometen a la reducción progresiva del porcentaje de sal utilizado en la elaboración del pan; a no instalar máquinas expendedoras de comidas y bebidas en lugares de fácil acceso para alumnos de enseñanza Infantil y Primaria y a impulsar la inclusión de información nutricional en las etiquetas; entre otras actuaciones. También se estudiará el uso de porciones, de forma que no fomenten un consumo excesivo de calorías; y se trabajará para disminuir la presencia de sodio en aquellos alimentos que más lo aporten a la ingesta de la población. Los grandes almacenes, hipermercados, supermercados y autoservicios se comprometen a difundir la Estrategia en sus puntos de venta y a promocionar productos de marca propia que favorezcan los objetivos de la Estrategia. La hostelería y restauración, por su parte, se comprometen a proporcionar a los clientes la información nutricional de sus menús, a fomentar el consumo de fruta, ensaladas y verduras; a disminuir progresivamente la proporción de grasas saturadas; a sustituir progresivamente las grasas animales por las vegetales y a emplear sal yodada en las comunidades autónomas donde haya déficit de la misma.

En el ámbito sanitario , consciente de que los profesionales del Sistema Nacional de Salud juegan un papel protagonista en la prevención de la obesidad, la Estrategia NAOS pretende sensibilizarles respecto a la importancia del sobrepeso y, en particular, de la obesidad como enfermedad crónica que debe requerir de especial atención. Se realizarán campañas periódicas de detección precoz a través del índice de masa corporal (IMC); se hará promoción de la lactancia materna y se llevarán a cabo estrategias informativas y de ayuda para prevenir la obesidad en aquellos grupos que sean más susceptibles de experimentar una rápida ganancia de peso como mujeres embarazadas o en la menopausia.

Otro de los puntos destacados de la Estrategia es la creación de un Observatorio de la Obesidad que analice periódicamente la prevalencia de la obesidad en la población española, especialmente en la población infantil y juvenil, y mida los progresos obtenidos en la prevención de esta enfermedad. El Observatorio estará compuesto por representantes del Ministerio de Sanidad, CC.AA., Ayuntamientos, sociedades científicas, fundaciones y asociaciones, empresas de alimentación y organizaciones de consumidores. Este Observatorio serán clave para valorar el éxito de la Estrategia NAOS.