Futuros avances en biología molecular y cáncer

El diagnóstico molecular va a fundamentar el futuro del manejo del cáncer, debido a la clasificación funcional de los tumores.

Los avances en biología molecular van a revolucionar en pocos años el manejo del cáncer de manera que ya no abordaremos los tumores malignos según su localización, sino según las alteraciones genéticas implicadas», ha dicho el doctor Larry Norton presidente de la American Society of Clinical Oncology (ASCO) y jefe del servicio de Tumores Sólidos del Sloan Kettering Cancer Centre de Nueva York, durante su participación en la IV Conferencia de Cáncer de Mama que ha tenido lugar en Madrid.

Esta nueva visión científica permitirá a los oncólogos una elección más adecuada del tratamiento, igual que existe ya con las infecciones, para las que se hace un diagnóstico microbiológico que permite identificar el microorganismo responsable y elegir el tratamiento más conveniente.

Según este especialista, en el futuro el manejo del cáncer se fundamentará en las técnicas de diagnóstico molecular, la clasificación funcional de los tumores, y el tratamiento precoz con terapias más eficaces y menos tóxicas. En este sentido, los avances que está viviendo la oncología médica serán trepidantes en esta década, afirma el experto, ya que se profundizará mucho más en el conocimiento de la enfermedad de lo que se ha conseguido a lo largo de todo el siglo XX. «Gracias a los avances de la biología molecular es posible diseñar fármacos específicos dirigidos a dianas terapéuticas concretas; aunque ello no implica olvidar los procedimientos clásicos en el manejo de la enfermedad, todavía muy útiles en diversos tumores», explica Norton.

Respecto al futuro prometedor de las vacunas, el especialista recuerda que hasta ahora no han funcionado contra el cáncer, porque éstas sólo ayudan al organismo a atacar una diana celular, mientras que cualquier tipo de neoplasia maligna tiene varias dianas e incluso algunas, ni siquiera presentan dianas específicas.

«Debemos ir a dianas polivalentes, que sean controladas mediante rigurosos ensayos clínicos. También se está investigando en las vacunas de células dendítricas y éstas se encargarán de que el ADN enseñe al organismo cómo atacar sólo las células anormales. No debemos confundir estas alternativas con la terapia génica, que básicamente consiste en introducir genes sanos en células alteradas», añade el experto.