11Dic. 12
Investigadores del VHIR hallan dos proteínas claves en la agresividad y la capacidad de metástasis de este tipo de cáncer infantil
Hace un año y medio, el laboratorio de Investigación Traslacional en cáncer pediátrico del Vall d’Hebron Institut de Recerca (VHIR) identificó la implicación de una vía de señalización -vía Notch- en el agresividad, la capacidad invasora y de metástasis de los rabdomiosarcomas, un tipo de cáncer infantil que supone un 8% de todos los cánceres en niños y niñas. Este grupo de investigación del VHIR ha dado un paso más en el conocimiento de la Vía Notch, identificando nuevas proteínas implicadas en el proceso de metástasis en el rabdomiosarcoma. Concretamente, el nuevo estudio identifica dos proteínas: la integrina-a2 y la N-cadherina.
La vía de señalización Notch desempeña un papel clave en la proliferación celular, el crecimiento y la diferenciación de las células de rabdomiosarcoma. También controla su capacidad migratoria y de formación de metástasis y, por tanto, la agresividad que los caracteriza. La sobreexpresión de componentes de esta vía está implicada en diversos tipos de tumores. El estudio, que se ha llevado a cabo, gracias a la ayuda de La Marató de TV3 y que se ha publicado en el British Journal of Cancer (BJC) , identifica por primera vez estas dos proteínas, concretamente en el rabdomiosarcoma. Estas proteínas están «muy relacionadas con la adhesión de las células tumorales, la velocidad a la que se pueden mover y su capacidad invasora o de germinar en otros órganos. Inhibir estas proteínas podría enlentecer o bloquear este proceso de metástasis y, por tanto, podrían considerarse dos nuevas dianas terapéuticas «, explica el Dr. Josep Roma, uno de los investigadores del proyecto.
Tratamientos experimentales de próxima aplicabilidad clínica
El estudio ha utilizado anticuerpos monoclonales que bloquean la acción de estas proteínas. Esto se ha traducido en una disminución de la capacidad invasiva de las células tumorales in vitro y, a pesar de tratarse de un tratamiento muy experimental que precisará de validaciones y ensayos clínicos posteriores, existen ya inhibidores selectivos de estas proteínas en fase de ensayo clínico en otros tumores. Por tanto, una vez validados los resultados con los estudios necesarios, su aplicación podría darse relativamente pronto.
Rabdomiosarcoma
El cáncer infantil afecta a unos 900 niños, cada año, en España. El 8% de los tumores detectados, entre 80 y 90 anuales, son un rabdomiosarcoma. Se trata de tumores malignos que pueden aparecer en gran variedad de localizaciones (extremidades, cabeza y cuello, nariz, orejas, etc.). Según su localización y subtipo histológico y molecular serán más o menos agresivos, con más capacidad invasora, destructora o de metástasis. En los casos más favorables puede haber una tasa de curación de un 80-90%. Pero, si la enfermedad se halla en fase avanzada o se presenta con metástasis, el pronóstico es mucho más desfavorable y la tasa puede ser de un 65%.
Oncólogos pediátricos e investigadores han visto un aumento de la supervivencia del cáncer infantil durante los últimos 15 años, gracias a nuevos tratamientos más individualizados y a una mejor definición molecular del tumor. Aún así, un 20% de los niños con cáncer no se curan. La investigación en cáncer pediátrico del VHIR tiene como objetivo buscar tratamientos altamente efectivos para los casi mil niños a los que, anualmente, en España, se les ha diagnosticado un cáncer y por eso la investigación traslacional en este campo es primordial . «Conocer las vías de señalización celular responsables de la agresividad de los rabdomiosarcomas permitirá identificar qué tumores tienen más capacidad para hacer metástasis a distancia», indica la Dra.. Soledad Gallego, responsable de este estudio, «y nos permitirá incorporar una nueva estrategia terapéutica a la quimioterapia estándar».
*foto:células de rabdomiosarcoma en cultivo teñidas con un anticuerpo contra la alfa9-Integrina
© 2022 Medicina Television S.A Spain