Investigadores estadounidenses acotan el gen de la longevidad en el cromosoma 4

Un grupo de investigadores de Boston han estudiado más de 130 grupos de hermanos que superen los 90 y los 100 años para determinar qué genes determinan una mayor longevidad.

Un grupo de investigadores del centro Beth Israel Deaconess de Boston, Estados Unidos, acaba de publicar un estudio en el que asegura haber identificado un grupo de genes entre los que se encuentran los responsables de la longevidad. La investigación, liderada por Tom Perls, partió de la observación de que los años de vida de las personas no sólo están relacionados con sus estilos de vida, pues «la existencia de familias excepcionalmente longevas sugiere que la etiología genética puede ser un componente importante», afirma el estudio.

Por ello han estudiado a estas personas especialmente longevas, que superan o rozan los cien años de edad y que además tienen hermanos o hermanas que destacan también por su avanzada edad, todos ellos además en buen estado de salud. Pues en opinión de los investigadores, también hay un factor genético que «retrasa la aparición o protege contra enfermedades asociadas a la edad, como enfermedades cardiovasculares, infartos, diabetes, cáncer o Alzheimer».

Este equipo de investigación ha estudiado a más de 130 familias, comparando ADN de conjuntos de hermanos de más de 90 años con uno de los hermanos que supere los 98 años de edad. En total, 308 personas con edades entre 91 y 109 años.

Objetivo: cromosoma 4

De entre decenas de miles de genes, acotaron su búsqueda a una región del cromosoma cuatro, que revelaba similitudes entre los sujetos del estudio. Este cromosoma contiene, según los investigadores, entre 100 y 500 cromosomas, entre los cuales se encuentra la clave de la longevidad. La esperanzadora hipótesis es que en uno o varios de estos genes se encuentre una gran protección contra las enfermedades. Esta es la primera vez que se estudia en humanos el papel de los genes a la hora de determinar la duración de la vida.

El estudio con resultados parciales ha sido publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences , pero sigue en marcha y recluta voluntarios centenarios en la red para proseguir con su investigación. Sin embargo, no quieren crear falsas esperanzas y afirman que no buscan la fuente de la eterna juventud, sino la forma de envejecer mejor.

El estudio en PNAS On Line