La asistencia con telemedicina mejora el control de los pacientes con HTA

El estudio AIRMED-CARDIO 2 ha permitido evaluar factores como la calidad de vida de los pacientes, la viabilidad de un sistema de telemedicina en atención primaria y el control y seguimiento de la hipertensión arterial. Un 64 por ciento de los pacientes atendidos por este sistema logró estar controlado.

Diversos estudios epidemiológicos calculan que entre el 19 y 30 por ciento de la población española sufre hipertensión. A esta elevada incidencia hay que sumar el bajo grado de control de la presión arterial, estimado en cifras que oscilan entre el 16 y 24 por ciento. Partiendo de este escenario nace el proyecto AIRMED-CARDIO 2, que ha sido presentado por la Ministra de Sanidad y Consumo, Ana Pastor.

Este proyecto tiene el objetivo de evaluar la importancia de la implementación de los sistemas telemáticos como ayuda en el seguimiento de factores de riesgo de enfermedades. La utilización de estas tecnologías supone algunas ventajas, como un seguimiento más regular en los pacientes extrahospitalarios, reducción de la frecuencia con que estos pacientes acuden al sistema de atención sanitaria y además se añade un valor diagnóstico y un eventual consejo médico al paciente gracias a la utilización de un software específico.

«La Telemedicina permitirá incorporar al Sistema Nacional de Salud un nuevo modelo de atención sociosanitaria, en consonancia con las propuestas de la OMS», subrayó Ana Pastor. Gracias a estas tecnologías el paciente crónico puede participar más activamente en el cuidado de su salud y los profesionales pueden hacer un seguimiento constante de su evolución. Los mayores problemas para controlar al hipertenso son la constancia en el tratamiento y modificar los comportamientos. El doctor Joaquín Márquez, Director Médico del proyecto y Jefe de Sección de Arritmias del Hospital Universitario Puerta del Hierro, explica la necesidad de convertir al paciente «en un protagonista de su salud, debe tener un papel activo en su control, que en ocasiones es muy difícil, ya que las enfermedades asintomáticas hacen que el paciente no se preocupe en muchos casos de controlarse».

El ensayo, en el que han participado el Instituto de Salud Carlos III, la Fundación Vodafone y Novartis, ha contado con la participación de 480 pacientes divididos en dos grupos, uno de ellos conforma el grupo de telemedicina, mientras que el segundo es el grupo de control. En el grupo controlado a través del sistema de teleasistencia, el 64 por ciento de los pacientes logró estar controlado, un 14 por ciento más del nivel determinado como control óptimo y que se cifró en un 50 por ciento.

Cómo funciona el sistema telemático

El sistema sobre el que se ha basado este proyecto está configurado por cuatro entidades: una estación central, el agente sanitario, el paciente y el gestor. El paciente tiene un móvil GSM con una sesión WAP que reproduce fielmente una consulta habitual en su centro sanitario, durante esta sesión el paciente contesta un cuestionario y transmite diversos parámetros de exploración como la tensión arterial, ECG o el peso. El paciente comienza la sesión siguiendo el protocolo o a demanda del médico, que se lo comunica a través de un mensaje. En cuanto a la automedida de la tensión arterial, ECG y peso, el paciente puede enviar los datos conectando entre sí los aparatos o tecleándolos en su teléfono móvil.

El sistema de recepción de datos le contesta inmediatamente. Una vez archivados los datos, el médico accede vía internet a ellos y manda un mensaje al paciente en el que le comunica cómo está o cualquier incidencia que deba subrayar. Finalmente el médico envía cada cierto tiempo al Centro Sanitario el resumen de la evolución de cada paciente.