La cirugía bypass podría tratar el dolor precordial mejor que la angioplastia más stent

Un estudio en Circulation reivindica el papel de la cirugía coronaria y muestra mejores resultados de la cirugía bypass frente al tratamiento percutáneo, disminuyendo el dolor precordial durante el año siguiente a la intervención. En la presentación del estudio, sin embargo, no se detalló el tipo de stent utilizado.

La cirugía bypass es mejor que la angioplastia con stent en el manejo del dolor precordial, aumentando la calidad de vida del paciente durante el año siguiente a la intervención, según un nuevo estudio en la revista Circulation , órgano de expresión de la Sociedad Americana del Corazón (AHA).

Este estudio es el primero aleatorio que compara la mejora en la salud del corazón usando un cuestionario específico sobre calidad de vida que evalúa el nivel de dolor precordial en pacientes que han recibido angioplastia junto a stent versus cirugía bypass de revascularización. En la comunicación de los resultados del estudio, sin embargo, no se detalla el tipo de stent utilizado.

La solución quirúrgica consiste en utilizar venas del pecho o de la pierna para recircular la sangre salvando las arterias bloqueadas y mejorando la llegada de sangre y oxígeno al corazón. En la angioplastia se inserta a través de un catéter un balón en la arteria que al inflarse comprime la placa que la obstruye abriéndola de nuevo. Entonces, se coloca un stent, o malla metálica que impide la restenosis o reoclusión de la arteria.

«Los pacientes intervenidos con cirugía bypass experimentan una mejora mayor en su salud durante el siguiente año, con menos dolor precordial, que aquellos que han recibido un stent» afirma uno de los autores el doctor William S. Weintraub, de la Emory University en Atlanta.

Detalles del estudio

En la investigación participaron 988 pacientes con más de una arteria bloqueada que fueron derivados de forma aleatoria a una intervención percutánea coronaria o a cirugía bypass. La edad media de los pacientes era de 61 años, el 79 por ciento eran hombres, un 14 por ciento eran pacientes diabéticos, un 24 por ciento padecían síndrome coronario agudo y un 45 por ciento eran hipertensos.

Su salud cardiaca se midió a los seis meses y al año de la intervención con el Cuestionario de Angina de Seattle basado en 19 ítems que intentan determinar las limitaciones físicas, la estabilidad de las anginas y su frecuencia, la satisfacción con el tratamiento recibido y la percepción de la calidad de vida. El grado de satisfacción en ambos grupos fue alto. Pero los pacientes tratados con cirugía bypass mostraron una mejoría 2,5 puntos mayor aproximadamente.