La combinación de nuevos fármacos ha permitido mejorar la supervivencia de los pacientes con Mieloma Múltiple

Hace diez años los recursos para el tratamiento del MM eran muy limitados y la perspectiva de supervivencia estaba entre los 30 y los 45 meses. Gracias a la introducción de nuevos fármacos hoy esperamos poder curar a enfermos y la supervivencia se ha duplicado en el peor de los casos.

En España existen unos 12.000 pacientes con mieloma múltiple (MM) y cada año se diagnostican 2.000 nuevos casos de esta enfermedad, que constituye el segundo tipo más frecuente de cáncer sanguíneo después del linfoma de Hodgkin. Con el objetivo de actualizar las novedades del último año en el campo del MM, desde la biología hasta las últimas novedades terapéuticas, el Grupo Español de Mieloma (GEM) con el apoyo de Celgene, ha reunido a los principales hematólogos a nivel mundial en el encuentro científico MM: El conocimiento de 2011 en la práctica clínica.

El mieloma múltiple es una forma incurable de cáncer de la sangre que afecta sobre todo a personas con una media de edad de 65 años, se inicia en la médula ósea y se caracteriza por una proliferación excesiva de células plasmáticas. Estas células producen niveles elevados de anticuerpos de mieloma que se acumulan en la sangre y en la orina, impiden el funcionamiento normal de la médula y dañan el hueso.

Hace diez años los recursos para el tratamiento del MM eran muy limitados y la perspectiva de supervivencia en los enfermos mayores era muy baja, con medianas de supervivencia que no llegaban a los 30 meses en personas mayores, alcanzando los 40-45 meses en las personas jóvenes a las que se había trasplantado. Sin embargo, “hoy esperamos poder curar a enfermos y la supervivencia se ha duplicado en el peor de los casos. Se trata de pequeños avances que, unidos, han dado lugar a estrategias terapéuticas complejas prolongadas con resultados impensables hace unos años”, según ha asegurado durante el encuentro el Dr. Juan José Lahuerta, jefe del servicio de hematología del Hospital 12 de Octubre y coordinador del encuentro.

“Este aumento de la supervivencia se ha conseguido gracias a la introducción de nuevos fármacos, entre los que se encuentra la lenalidomida, un tratamiento que tiene un doble efecto, tumoricida e inmunomodulador. El efecto inmunomodulador es una de sus características singulares”, tal y como explicó el Dr. Jesús San Miguel, jefe del servicio de hematología del Hospital Clínico Universitario de Salamanca y coordinador del encuentro.

“Lenalidomida es un componente fundamental en el tratamiento del mieloma múltiple. Los resultados que está ofreciendo la lenalidomida en la fase de mantenimiento son muy importantes y es probablemente uno de los mayores avances en el manejo de esta patología”, afirmo el Dr. Lahuerta.

Los expertos presentes en el encuentro han coincidido en asegurar que los tratamientos del MM son muy minuciosos. El Dr. Lahuerta, se ha referido a la terapia frente al MM como “una escalera en la que cada peldaño se consigue con un tratamiento determinado y se va subiendo en niveles de citorreducción tumoral, hasta llegar al nivel máximo, que es la remisión completa. Pensar en un 40-50% de remisión completa en personas mayores y un 70-80% en enfermos jóvenes no es descabellado, mientras que hace 20 años era de un 10% en personas mayores y un 20% en personas jóvenes”.

Por otro lado, el Dr. Joan Blade, del servicio de Hematología del Hospital Clinic i Provincial de Barcelona y coordinador de la reunión, ha asegurado que en la reunión se han tratado “los avances en determinar la enfermedad mínima residual después de los tratamientos y cómo esta enfermedad mínima residual modifica el pronóstico y puede orientar sobre la posible duración del tratamiento”.

Finalmente, uno de los grandes puntos de interés de la reunión ha sido el tratamiento en primera línea de esta enfermedad. En este sentido, el Dr. San Miguel ha explicado que en el diseño del tratamiento del MM “hay que diferenciar entre enfermos jóvenes, que son candidatos a hacer un trasplante, y los enfermos mayores, en los que el trasplante tendría una toxicidad excesiva”.

La evolución del trasplante en pacientes con MM

Además de los tratamientos, los trasplantes en MM también han evolucionado hacia el aumento de la supervivencia. En una sesión dedicada al trasplante coordinada por el Dr. Blade, este especialista ha recordado que antes “el trasplante del MM consistía en dosis muy elevadas de quimio-radioterapia. Era el llamado trasplante mieloablativo o convencional. Se hacía a menores de 50 -55 años, pero la mortalidad era muy alta, en torno al 40-45%. Sin embargo, ahora se ha pasado al trasplante alogénico con acondicionamiento de intensidad reducida, también llamado minitrasplante. La preparación para el trasplante es sólo con quimio, las dosis no son muy altas y la tolerancia es mejor y la mortalidad se ha reducido a un 15-20%”.

Por último, el doctor Lahuerta ha recalcado que para todos los enfermos la estrategia es diferente. “A los enfermos jóvenes se les administra un tratamiento de inducción que dura entre 4 y 6 meses; después un trasplante y, por último, un mantenimiento. Sin embargo, en los enfermos mayores se hace también el mantenimiento, pero no el trasplante y en las personas muy mayores (también denominadas pacientes frágiles), el tratamiento de inducción se atenúa bastante para evitar toxicidades que a veces son muy peligrosas”, ha concluido el especialista.