La comisión Europea ha otorgado la autorización de comercialización de Viread® (tenofovir disoproxil fumarato) para el tratamiento de la hepatitis B crónica en los 27 países miembros de la Unión Europea

Administrado en un comprimido una vez al día, Viread actúa bloqueando la polimerasa del ADN del virus de la hepatitis B (VHB), enzima indispensable para la replicación del virus en las células hepáticas. Viread ha sido aprobado en la Unión Europea para su uso en pacientes adultos con infección crónica por VHB con patología hepática compensada, signos de replicación viral activa, persistencia de niveles elevados en suero de alanina aminotransferasa (ALT) y pruebas histológicas de inflamación activa y/o fibrosis. El fármaco ha sido aprobado recientemente para el tratamiento de la hepatitis B crónica en Turquía y Nueva Zelanda y, actualmente, las solicitudes de comercialización están en espera del examen reglamentario en Estados Unidos, Canadá y Australia.

.»La hepatitis B es un problema importante en Europa, donde aproximadamente 20.000 personas mueren de complicaciones de la enfermedad cada año», declara el Dr. Patrick Marcellin, Profesor de Hepatología en la Universidad de París y Jefe de la Unidad de Investigación sobre Hepatitis Viral del Hospital Beaujon de Clichy (Francia). «Como médico e investigador que ha estudiado detenidamente este fármaco en estudios clínicos a gran escala, pienso que Viread es una importante opción de tratamiento para pacientes que empiezan una terapia, así como para aquellos que ya han seguido otras medicaciones, incluida la lamivudina».

La presente aprobación se basa principalmente en los datos de dos estudios clínicos de fase III en curso, los estudios 102 y 103, en pacientes (n = 375) con infección crónica por VHB que recibían una terapia contra el VHB por primera vez (sin tratamiento previo). Algunos pacientes (n = 51) de los estudios de fase III habían sido tratados anteriormente con lamivudina (con tratamiento previo). Dichos estudios evalúan la eficacia, la seguridad y la tolerancia de Viread comparado con Hepsera® (adefovir dipivoxil). Los resultados positivos de estos estudios se presentaron en la asamblea anual de la Asociación Americana para el estudio de las Enfermedades del Hígado en Boston (Massachusetts) en noviembre de 2007. Otros datos sobre 72 semanas de estos mismos estudios se presentaron en la asamblea anual de la Asociación Europea para el Estudio del Hígado en Milán (Italia), celebrada del 23 al 27 de abril.

«Los datos de los estudios 102 y 103 demuestran que Viread posee muchas de las cualidades preferidas de un tratamiento antivírico: supresión viral rápida y profunda, características de seguridad bien establecidas gracias a más de un millón de años de experiencia en pacientes y comodidad de la administración una vez al día», precisa Kevin Young, Vicepresidente Ejecutivo de Operaciones Comerciales de Gilead Sciences. «Ahora que Viread está aprobado para la hepatitis B crónica en Europa, nuestra prioridad principal es trabajar para asegurarnos de que todos los sujetos que necesiten esta medicación tengan acceso a ella lo antes posible».

Viread es el segundo antivírico de Gilead de una sola administración diaria para el tratamiento de la hepatitis B crónica, habiendo sido Hepsera el primero, que ahora se utiliza ampliamente en Europa. Además, la compañía también está desarrollando compuestos de pequeñas moléculas para el tratamiento de la hepatitis C y un hepatoprotector para fibrosis hepática causada por hepatitis.

Viread está disponible en Europa desde 2002 como integrante de una politerapia para la infección por VIH en adultos. Su principio activo, el tenofovir disoproxil, es la molécula más prescrita para el tratamiento de la infección por el VIH en varios países de la Unión Europea.

Acerca de Viread (tenofovir disoproxil fumarato) para VIH

En los Estados Unidos, Viread se receta asociado a otros agentes antirretrovíricos para el tratamiento de la infección por VIH-1. Se han notificado casos de lactoacidosis y de hepatomegalia grave con esteatosis, incluidos casos mortales, con el uso de análogos nucleósidos solos o asociados a otros antirretrovíricos. Viread no está aprobado para el tratamiento de la infección por el VHB y no se ha establecido la seguridad y eficacia de Viread en pacientes coinfectados por el VHB y el VIH. Se han notificado casos de reagudización grave de la hepatitis B en pacientes que interrumpieron Viread. La función hepática debe ser vigilada atentamente mediante un seguimiento a la vez clínico y analítico, durante varios meses como mínimo, en pacientes coinfectados con el VIH y el VHB que discontinúan Viread. Si es adecuado, puede autorizarse el inicio de un tratamiento contra la hepatitis B.

Es importante que los pacientes estén conscientes de que los fármacos antisídicos, incluido Viread, no curan la infección por el VIH, o sida, y no reducen el riesgo de transmisión del VIH a otras personas.

Se han notificado casos de insuficiencia renal, incluidos casos de insuficiencia renal aguda y de síndrome de Fanconi (disfunción de los túbulos renales con hipofosfatemia grave) en conexión con el uso de Viread. Se recomienda calcular el aclaramiento de la creatinina en todos los pacientes antes de iniciar la terapia con Viread y cada vez que sea clínicamente indicado durante la terapia. Debe efectuarse una vigilancia sistemática del aclaramiento de la creatinina calculada y el fósforo sanguíneo en los pacientes vulnerables a una disfunción renal. Se recomienda ajustar el intervalo de administración y vigilar atentamente la función renal de todos los pacientes que presenten un aclaramiento de la creatinina inferior a 50 ml/min. Debe evitarse el uso de Viread con el uso coincidente o reciente de un fármaco nefrotóxico.

El prospecto de envase en los Estados Unidos advierte que la coadministración de Viread y didanosina debe efectuarse con precaución. Debe vigilarse atentamente la aparición en los pacientes de efectos secundarios asociados a la didanosina y, si es el caso, debe interrumpirse. En los pacientes tratados con atazanavir y lopinavir/ritonavir más Viread, debe vigilarse atentamente la aparición de efectos secundarios asociados a Viread y, si es el caso, debe interrumpirse. Si se coadministra con Viread, se recomienda recetar atazanavir con ritonavir 100 mg. Atazanavir sin ritonavir no debe coadministrarse con Viread.

Se ha comprobado la disminución de la densidad mineral de los huesos en la columna lumbar y las caderas con el uso de Viread, pero se desconoce el efecto a largo plazo en la salud ósea y el riesgo futuro de fracture. Se han notificado casos de osteomalacia (asociada a tubulopatía proximal) en conexión con el uso de Viread.

Se han observado cambios en los tejidos adiposos en pacientes que toman medicamentos antisídicos, pero se desconocen el mecanismo y los efectos a largo plazo de estos cambios. También se ha notificado síndrome de reconstitución inmune en pacientes tratados con una politerapia que incluye Viread.

Los efectos secundarios más corrientes en los pacientes que reciben Viread con otros antirretrovíricos en un estudio clínico fundamental (estudio 903) fueron reacciones gastrointestinales suaves o moderadas y mareos. Los efectos secundarios suaves o moderados que aparecen en más del cinco por ciento de los pacientes que recibían Viread fueron exantema (sarpullido, prurito, exantema maculopapuloso, urticaria, exantema vesiculoso y exantema pustuloso), cefalea, dolores, diarrea, depresión, dorsalgia, fiebre, náuseas, dolor abdominal, astenia (debilidad) y ansiedad. En otro estudio fundamental (estudio 907), menos de un uno por ciento de los pacientes interrumpieron su participación debido a reacciones gastrointestinales.

Acerca de Hepsera (adefovir dipivoxil)

En los Estados Unidos, Hepsera se prescribe para el tratamiento de la hepatitis B crónica en pacientes de 12 años de edad y más, con signos de replicación viral activa y pruebas de elevaciones persistentes de aminotransferasas séricas (ALT o AST) o de enfermedad histológicamente activa. No se recomienda Hepsera para niños menores de 12 años.

Se han notificado casos de reagudización grave de la hepatitis B en pacientes que interrumpieron el tratamiento contra la hepatitis B, incluido Hepsera. La función hepática debe ser vigilada atentamente tanto en los seguimientos clínicos como analíticos, durante varios meses como mínimo, en pacientes que interrumpen el tratamiento contra la hepatitis B. Si es adecuado, puede indicarse la reanudación del tratamiento. En pacientes expuestos al riesgo de disfunción renal subyacente, la administración prolongada de Hepsera puede resultar en nefrotoxicidad. Estos pacientes, debe vigilarse atentamente la función renal y puede ser necesario ajustar la dosis. El ajuste de la posología se recomienda en pacientes con creatinina sérica < 50 ml/min. Puede aparecer resistencia al VIH en pacientes con hepatitis B crónica y con infección por VIH no diagnosticada o no tratada que reciben tratamientos contra la hepatitis B, por ejemplo Hepsera, que pueden ser activos contra el VIH. Se han notificado casos de lactoacidosis y de hepatomegalia grave con esteatosis, incluidos casos mortales, con el uso de análogos nucleósidos solos o asociados a otros antirretrovíricos.

Los efectos secundarios comprobados en estudios controlados por placebo y en estudios abiertos son los siguientes: astenia, cefalea, dolor abdominal, diarrea, náuseas, dispepsia, flatulencias, aumento de creatinina e hipofosfatemia. Otros efectos secundarios observados en un estudio abierto con pacientes antes y después de un trasplante son disfunción renal, insuficiencia renal, vómitos, exantema y prurito.

Viread y Hepsera son el resultado de una investigación conjunta entre el Dr. Antonin Holy, del Instituto de Química Orgánica y Bioquímica de la Academia de ciencias de la república Checa (IOCB) en Praga, y el Dr. Erik DeClercq, del Instituto Rega de Investigación Médica de la Universidad católica de Lovaina (Bélgica).