La criocirugía permite curar hasta el 98% de los cánceres de carácter cutáneo-mucoso

Los especialistas reunidos en el último Congreso Nacional de Dermatología y Venerología piden que se amplie el uso de esta técnica.

La criocirugía se utiliza desde hace años en tratamientos dermatológicos de lesiones leves de piel (verrugas, lunares), pero su uso en tumores malignos aún no está muy extendido. Aunque se ha demostrado que esta técnica obtiene un elevado porcentaje de éxito en el tratamiento de lesiones más graves como los cánceres de carácter cutáneo mucoso, como se destacó en el pasado XXIX Congreso Nacional de Dermatología y Venereología celebrado en Barcelona.

Los tumores que mejor responden a la criocirugía son los que presentan lesiones de contenido líquido o semisólido, por lo que está especialmente indicada en carcinomas basocelulares y espinocelulares. Sus resultados son de «un 98 por ciento de efectividad», según el doctor José Fernández, del Servicio de Dermatología del Hospital Puerto Real de Cádiz, por lo que son «equiparables a los de la cirugía convencional».

También, la criocirugía es una técnica indicada en pacientes con contraindicaciones para la cirugía convencional, como pacientes de edad avanzada que no toleran la anestesia o presentan alteraciones en la coagulación de la sangre, pues es una intervención menos agresiva que la convencional y no precisa entrar al quirófano.

¿En qué consiste la criocirugía?

La criocirugía se basa en la utilización del frío. Consiste en introducir nitrógeno líquido en la zona afectada hasta que ésta se congela y se destruye. Es una técnica sencilla, con un tiempo corto de intervención y sin efectos secundarios. Pero el postoperatorio es largo, pues como explica el doctor Fernández, «la reacción inflamatoria que produce el nitrógeno en la piel hace que el postoperatorio se alargue un mes, mientras que en una intervención de cirugía convencional éste dura entre 7 y 10 días».

Pero a pesar de ello, este Congreso Nacional reveló que cada vez más dermatólogos demandan que se amplíe el campo de uso de la criocirugía, pues con ella se pueden tratar desde correcciones estéticas, hasta lesiones complejas como tumores del párpado, cara o de la cavidad nasal. El doctor Romero Cabrera, profesor adjunto del Servicio de Dermatología del mismo hospital gaditano, subrayó que es una técnica «que no requiere de una gran infraestructura, por lo que se puede disponer de ellas en centros no muy sofisticados, e incluso ambulatorios».

Actualmente, en España existen 200 especialistas en criocirugía, siendo el Hospital Puerto Real de Cádiz el que ha acumulado más experiencia, después de doce años de formación de residentes en esta especialidad.