La ética de los regalos a los médicos

La Asociación Médica Americana (AMA) está llevando a cabo una campaña para que los médicos no acepten los regalos que les ofrecen las compañías farmacéuticas. Lo más curioso de este caso es que son las propias compañías farmacéuticas las que financian buena parte del proyecto.

Esta campaña educativa, que se desarrollará a lo largo de 18 meses, se dirige tanto a médicos como a futuros médicos, para que cumplan las pautas éticas que ha creado esta asociación médica. El doctor Alan R. Nelson, ex presidente de la AMA y jefe del grupo de trabajo creado con este fin, señala que «muchos regalos a médicos tienen una función beneficiosa, y la mayoría de médicos y de representantes de la industria actúan de una forma ética en cuanto a estos regalos. Sin embargo, los estudios publicados al respecto sugieren que las dos partes implicadas no conocen que hay guías de consulta sobre estas prácticas».

Desde 1990 la Asociación Médica Americana cuenta con un código ético que señala específicamente que no resulta adecuado para los médicos aceptar regalos caros, viajes o comidas. Se aceptarán los regalos que supongan un beneficio para el paciente o aquellos que tengan una función educativa para el médico. Asimismo se recomienda que los regalos no superen los 100 dólares (unas 19.000 pesetas), ni se acepte dinero en efectivo.

El problema ético de aceptar regalos viene cuando esto puede tener algún tipo de influencia en la manera en que el médico trata al paciente. Así, por ejemplo, un médico podría recetar más un medicamento después de haber aceptado un regalo caro por parte del promotor de una compañía farmacéutica, es decir, que los regalos pueden animar a prescribir un medicamento.

Por eso, la AMA pretende que los médicos conozcan las guías éticas de consulta, esta base les permitirá abandonar la idea de que su juicio médico puede estar comprometido a causa de los regalos. La primera parte de la campaña consiste en información que se envía por correo a organizaciones médicas, facultades de medicina y hospitales, la otra parte consiste en más información que se puede consultar desde la página web de esta asociación médica.

La campaña tiene un presupuesto de un millón de dólares y aproximadamente dos terceras partes las financian nueve grandes farmacéuticas, por este motivo han surgido críticas, ya que hay quien piensa que con esta financiación se ha perdido en gran medida la credibilidad del proyecto. Pese a todo, la AMA defiende la importancia de que no sólo los médicos, sino también la industria entienda que existen estos códigos éticos.