La OMS solicita intensificar las medidas para luchar contra la doble infección Sida-Tuberculosis

La Organización Mundial de la Salud (OMS) anuncia un plan destinado a ampliar la colaboración entre los programas nacionales contra la tuberculosis y el VIH/SIDA a fin de frenar la creciente pandemia de coinfección tuberculosis-SIDA. Esta iniciativa se centrará principalmente en África, donde vive el 70 por ciento de los 14 millones de personas coinfectadas que hay en el mundo.

«El par tuberculosis/VIH es una combinación mortal, y hay que abordarlo con una estrategia que trate al individuo de forma integral», explica el doctor Lee Jong-wood, director general de la OMS. Según este experto, «con un tratamiento eficaz es posible curar la tuberculosis, tratar el VIH y preservar la salud de millones de personas».

El nuevo plan, en que se definen las intervenciones que deben llevarse a cabo frente a esta doble epidemia, también deberá constituir un apoyo decisivo a la iniciativa de la OMS «tres millones para 2005», que aspira a proporcionar antirretrovirales a tres millones de personas afectadas por el SIDA antes del final de ese año.

Optimizar los servicios de detección

En África, la mitad de las personas con VIH/SIDA desarrollan tuberculosis, y hasta un 80 por ciento de los enfermos de tuberculosis están infectados por el VIH. Por ello, una parte fundamental de la iniciativa consistirá en ampliar rápidamente los servicios de asesoramiento y pruebas voluntarias para el VIH en los programas contra la tuberculosis, para detectar a personas contagiadas de las dos enfermedades y remitirlas a los servicios de tratamiento antirretrovírico durante los dos próximos años. Si se proporciona formación adicional al personal sanitario, los programas contra la tuberculosis también podrán contribuir a la asistencia en la prevención del VIH, la distribución de antirretrovirales y la atención al paciente.

A la vez, se pretende seguir estas mismas pautas pero en la dirección opuesta, intensificando la detección de casos de tuberculosis en los lugares con alta prevalencia de VIH. Para ello deberán introducirse medios de cribado y pruebas para la tuberculosis en los centros donde se prestan servicios relacionados con el VIH/SIDA.

Si se somete sistemáticamente a las personas con VIH/SIDA a cribado y pruebas para detectar la presencia de tuberculosis, los casos coinfectados que no hayan desarrollado aún esta enfermedad podrán ser tratados con medicamentos profilácticos que previenen la tuberculosis activa, y curados si ya la hubieran contraído. Así se prolongará la vida de las personas con VIH/SIDA hasta que puedan beneficiarse de un mayor acceso a los antirretrovirales en los próximos años.

Cifras mundiales

En conjunto, las dos epidemias constituyen un enorme problema de salud pública. Actualmente, 40 millones de personas están infectadas por el VIH y cinco millones más se infectan cada año. Según la OMS, la tercera parte de los habitantes del planeta están hoy infectados por el bacilo de la tuberculosis. De ellos, más de ocho millones desarrollan la enfermedad, y dos millones mueren como consecuencia cada año.

Según los datos de la OMS respecto al nuevo plan y sus destinatarios, la gran mayoría de las personas infectadas por el VIH no conocen su estado y buscan asistencia sanitaria en los centros de salud generales. El asesoramiento y las pruebas del VIH para enfermos de tuberculosis basados en la utilización de pruebas rápidas ofrecen un punto de acceso a un continuum de servicios de prevención, atención, apoyo y tratamiento del VIH/SIDA y de la tuberculosis. Además, tal y como afirma el doctor Mario Raviglione, director del Departamento Alto a la Tuberculosis de la OMS, «la promoción y ampliación de las estrategias basadas en la colaboración están plenamente justificadas, puesto que se sabe que los antirretrovirales reducen la posibilidad de desarrollar tuberculosis en las personas con VIH/SIDA, en algunos casos hasta en un 80 por ciento».

La puesta en marcha de las nuevas directrices de la política provisional de colaboración en materia de tuberculosis y VIH coincide con la cuarta convocatoria de presentación de propuestas realizada por el Fondo Mundial de Lucha contra el SIDA, la Tuberculosis y la Malaria. La fecha límite de presentación es abril de 2004. La política provisional favorecerá las propuestas que aborden la doble epidemia de tuberculosis y SIDA.