La primera vacuna contra la infección tuberculosa latente podría curar también la enfermedad

El doctor Pere-Joan Cardona, investigador del Hospital Universitario Germans Trias i Pujol de Badalona (Barcelona) y director científico de la biofarmacéutica Archivel Farma, presentó nuevos avances en el tratamiento para luchar contra la tuberculosis, en el marco del simposio "Avances de las patologías infecciosas: implicaciones para la comunidad", que organizó la Fundación Mutua Madrileña y la Cátedra UCM-Pfizer en Enfermedades Infecciosas recientemente en Madrid.

Según las investigaciones del Dr. Cardona, RUTI, la única vacuna terapéutica del mundo contra la Infección Tuberculosa Latente (ITBL), que se encuentra ya en la recta final de la fase I de ensayo clínico en humanos, puede curar también la enfermedad. Datos de la Organización Mundial de la Salud de 2003 indican que la tuberculosis causa casi dos millones y medio de muertes al año. Un tercio de la humanidad padece la tuberculosis de forma latente y cada año se infectan cien millones de personas. El 10 por ciento de los infectados por el bacilo de Koch desarrollan la enfermedad de forma activa.

La hipótesis dinámica, una teoría que demuestra que es posible reducir la duración del tratamiento actual

El tratamiento actual de la enfermedad tuberculosa dura seis meses. Durante los primeros dos meses se administran tres fármacos para reducir el número de bacilos que están en crecimiento activo. Después, se debe seguir un tratamiento antibiótico durante cuatro meses adicionales para destruir los bacilos latentes.

La «hipótesis dinámica», teoría que sostiene el Dr. Cardona desde hace una década, considera que los bacilos latentes no permanecen dormidos en el tejido pulmonar durante años, como comúnmente se piensa, sino que reactivan su crecimiento constantemente. Los fármacos que se administran actualmente para combatir los bacilos en crecimiento pueden erradicar la infección latente, puesto que evitan el proceso de reactivación constante. Sin embargo, sólo un tratamiento de larga duración (nueve meses) permite que el cuerpo humano drene esos bacilos de forma natural.

La inoculación de la vacuna terapéutica RUTI inmediatamente después del tratamiento antibiótico supondría un verdadero avance, ya que con RUTI el sistema inmune identifica a los bacilos latentes y los destruye en sólo un mes. La eficacia de esta terapia contra la infección latente permitiría, en conclusión, reducir también el tiempo que dura el tratamiento de la enfermedad tuberculosa.

El ensayo clínico de la vacuna terapéutica RUTI

En el marco del encuentro científico que tuvo lugar en Madrid, el Dr. Pere- Joan Cardona comentó los resultados preliminares de la fase en la que se encuentra el ensayo clínico de la vacuna terapéutica RUTI, consistente en la inoculación de la vacuna ya en humanos, que se está llevando a cabo en la Unidad de Fase I del Hospital Germans Trias i Pujol.

Archivel Farma, la biofarmacéutica que está desarrollando RUTI y la primera en ensayar en humanos una vacuna contra la infección tuberculosa latente, dará a conocer los primeros resultados del ensayo en los próximos meses. Por el momento, en la recta final de la primera fase del ensayo, la vacuna no presenta ninguna toxicidad y da una buena respuesta inmune. La entidad prevé que el fármaco pueda comercializarse en 2013.

La principal ventaja de RUTI es que reduce el tratamiento de antibiótico isoniazido de nueve meses a uno, lo que implica disminuir el coste, la hepatotoxicidad -tóxico para el hígado- y el riesgo de abandono del mismo, cuyo índice es muy alto debido a la duración del tratamiento actual. El elevado coste logístico, sanitario y económico que requiere el tratamiento actual de la Infección Tuberculosa Latente disminuiría considerablemente con el de RUTI.