La salud bucodental es esencial en la mujer

En la pubertad, antes de la menstruación, durante el embarazo y en la menopausia las enfermedades periodontales tienen un especial protagonismo. Una madre gestante con periodontitis tiene al menos el doble de posibilidades de sufrir un parto prematuro.

Los cambios hormonales que experimenta la mujer en determinadas etapas de su vida condicionan extraordinariamente la aparición de algunos trastornos bucodentales y éstos, a su vez, se erigen en un problema de salud frecuente y preocupante para el sexo femenino. Las enfermedades de las encías, aunque también son habituales y trascendentales en los hombres, adquieren en la mujer una mayor dimensión, especialmente en la pubertad, el embarazo y la menopausia.

“Aunque la enfermedad periodontal afecta tanto a hombres como a mujeres, y en unas proporciones similares, se ha demostrado que las hormonas femeninas se relacionan directamente con la debilidad de la encía, de tal forma que con igual cantidad de bacterias la respuesta inflamatoria del organismo es mayor, produciendo gingivitis y agravando la periodontitis”, destaca el Dr. Pedro Bullón, Catedrático de Estomatología de la Universidad de Sevilla.

La salud de las encías y su relación con la salud de la mujer será uno de los temas más sobresalientes de la 47ª Reunión Nacional de SEPA y la 3ª Reunión de Higiene Bucodental, con la presentación oficial de un Libro, elaborado por la Sociedad Española de Periodoncia (SEPA) y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO). “Salud Bucal en la Mujer. Prevención a lo largo de la vida” aborda, entre otros aspectos, las claves de la mayor incidencia y repercusión de los trastornos periodontales durante determinados periodos de la vida de una mujer (adolescencia, ciclo menstrual, embarazo, menopausia,…), asociados a los cambios hormonales.

Y es que la atención de la salud bucodental adquiere una especial trascendencia en la mujer y, más aún, en determinadas etapas de su vida. Como explica el Dr. Pedro Bullón, uno de los coordinadores del libro, “existen cambios hormonales específicos de la mujer que hacen que en muchas ocasiones se genere una patología periodontal diferenciada”.

Durante la vida de la mujer hay periodos en los que las encías van a ser más susceptibles a la inflamación y a sufrir enfermedades, principalmente por razones hormonales. Como resalta el otro coordinador del Libro, el Profesor Josep María Lailla, Presidente de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), “en la pubertad, antes de la menstruación, durante el embarazo y en la menopausia las enfermedades periodontales tienen un especial protagonismo”.

De hecho, existen patologías periodontales propias de una situación determinada en la mujer, como la gingivitis gestacional, que afecta a la mayoría de mujeres embarazadas y que se caracteriza por la hipertrofia de las papilas interdentales y un aumento notable de la vascularización. También existen formas tumorales en la boca, como el épulis o granulomas gingivales, que aparecen en el embarazo y pueden desaparecer espontáneamente después del mismo con un correcto control de la placa bacteriana, aunque frecuentemente requieren ser eliminados con cirugía.

Cuida tus encías… durante la pubertad

A diferencia de lo que se acepta habitualmente, la enfermedad periodontal no es únicamente un problema del adulto; prácticamente, destaca el Dr. Pedro Bullón, “todos los adolescentes sufren gingivitis por placa bacteriana, que es el primer estadio de la enfermedad periodontal”. En la adolescencia, las enfermedades periodontales pueden progresar y agravarse.

En la pubertad pueden desarrollarse signos marcados de inflamación en las encías, sin un aumento claro en los niveles de placa bacteriana. Se denomina “gingivitis puberal” y está asociada a los incrementos de las hormonas sexuales, estrógenos y progesterona, que ocurren alrededor de los 12 años. Estos cambios hormonales producen un incremento de la circulación sanguínea en las encías, lo que favorece una respuesta inflamatoria exagerada a la acción de las bacterias, siendo habitual el sangrado. Se trata de una situación generalmente transitoria, y reversible tras la pubertad, al menos de forma parcial. La eliminación de la placa bacteriana mediante instrucciones de higiene adecuada y/o profilaxis dental (“limpieza de boca”) son los factores clave para controlar los síntomas.

Ocasionalmente, algunas mujeres presentan una gingivitis menstrual, presentando sangrado e inflamación en las encías con tono rojo brillante así como úlceras en los carrillos. La gingivitis menstrual ocurre justo antes de la menstruación y desaparece una vez que ésta ha empezado.

Cuida tus encías… durante el embarazo

Las alteraciones en los niveles hormonales que se producen durante el embarazo afectan a los vasos sanguíneos de las encías, al funcionamiento de las células del periodonto (tejido que rodea y soporta los dientes), a las bacterias de la placa y al sistema inmune local. Esto explica que la inflamación de las encías aumente durante el embarazo, y desaparezca habitualmente tras el parto (lo que se conoce como gingivitis del embarazo o gravídica).

Hoy en día se conoce la importancia que tiene la patología inflamatoria- infecciosa dental, como la periodontitis, en la posibilidad de desencadenar amenazas de parto pretérmino (antes de la semana 37 de gestación). Como explica el Profesor Josep María Lailla, “este fenómeno está estrechamente ligado a la liberación de prostaglandinas, que son sustancias oxitócicas que actúan en primer término en la maduración cervical y, posteriormente, como inductoras de contracciones uterinas”. Además, los cambios del pH en la saliva, el aumento de la misma y las modificaciones en la placa dental durante la gestación son hechos a tener en cuenta en estas mujeres.

La enfermedad periodontal puede afectar al 36-100% de las embarazadas (según los estudios), siempre que haya gingivitis previa. La encía está intensamente enrojecida, sangra fácilmente, está engrosada y con aumento claro su tamaño entre los dientes, lo que permite que haya más bacterias por debajo de la encía.

Si la mujer embarazada tiene gingivitis o periodontitis previa al embarazo, se eleva el riesgo adicional de que haya resultados adversos del embarazo, principalmente parto prematuro o bajo peso. Se calcula que el riesgo de parto prematuro se puede llegar a triplicar si la madre tiene periodontitis (el riesgo oscila entre 2.30 y 5.28, según los estudios). Además, se ha relacionado la enfermedad periodontal con el aumento del tiempo en que una mujer tarda en quedarse embarazada; se sugiere que la periodontitis podría ser un factor a tener en cuenta (similar al control de la obesidad) para aumentar las posibilidades de conseguir un embarazo.

También es conocido el efecto de las periodontitis en el control de la diabetes. El control de la salud gingival es fundamental en casos de diabetes gestacional, para evitar posibles complicaciones tanto en la madre como en el feto.

Según destaca el Dr. Pedro Bullón, “el embarazo supone la necesidad de alimentar al futuro niño y el organismo femenino se somete a un estrés que puede generar patologías. La boca como parte de ese organismo se ve influida por todas esas circunstancias, pero también la patología bucal puede hacer alterar la evolución del embarazo o puede empeorar ciertas patologías sistémicas”.

Por ello, recalca el presidente de la SEGO, el Prof. Lailla, “los ginecólogos y los obstetras recomendamos a todas nuestras pacientes una visita al dentista al inicio del embarazo”; se insiste en la necesidad de resolver los posibles problemas periodontales de la mujer antes del embarazo o, como tarde, en las primeras semanas del mismo. Como se subraya desde SEPA y SEGO, de la misma manera que sucede con la preparación que realizan para fortalecer sus huesos, es recomendable que las mujeres embarazadas o que pretendan tener un hijo sigan un especial cuidado con la salud bucodental y se preparen bucalmente para ser madres (visitas al odontólogo, higiene oral adecuada, y tratamientos periodontales si son necesarios).

Una adecuada técnica de higiene bucal (utilización frecuente de cepillo dental, cepillos interdentales y/o seda dental) es fundamental, no sólo para reducir a la mínima expresión la gingivitis, sino para prevenir la aparición de posibles efectos adversos en el embarazo. La visita al dentista o al periodoncista durante el embarazo permite prevenir, así como identificar y tratar, los signos y síntomas de la gingivitis gravídica. Los tratamientos periodontales durante el embarazo son beneficiosos para la salud de las encías de la madre y seguros para el feto.

Cuida tus encías… durante la menopausia

En la menopausia se reducen tanto los niveles de estrógenos (disminuyendo el efecto antiinflamatorio de estas hormonas en la encía) como de progesterona (reduciéndose la densidad ósea y apareciendo la osteoporosis). En esta etapa de la vida de la mujer, el déficit estrogénico produce alteraciones significativas en los tejidos de la boca, con una menor secreción y cambios en la composición bioquímica de la saliva, y desórdenes en la flora bucal.

Habitualmente, en la mujer menopáusica se pueden apreciar trastornos periodontales como la gingivitis atrófica (con una palidez anormal), gingivoestomatitis postmenopaúsica (encías brillantes y secas, sangrado fácil y color que varía entre pálido y rojizo) y malestar bucal, con sensación de quemazón, sequedad y mal sabor («Síndrome de boca ardiente»).

En esta situación, es fundamental el mantenimiento de unos niveles bajos de placa bacteriana. Las visitas al odontólogo o al periodoncista se deben hacer de forma periódica, con el fin de identificar cualquier cambio a nivel bucal. En el caso de estar tomando bisfosfonatos orales (para tratar la osteoporosis), se debe informar al especialista para que tome las medidas preventivas y terapéuticas oportunas.

Un manual de referencia

Sobre todos estos aspectos se profundiza en el libro Salud Bucal en la Mujer. Más de 40 expertos, procedentes del ámbito de la Odontología y de la Ginecología, han colaborado en la elaboración de este manual, que tiene como principal objetivo poner en manos de los profesionales de la salud y de las personas interesadas una actualización de los conocimientos sobre la Salud Bucal en la Mujer. Para ello, se ha contado con la colaboración de la Sociedad Española de Periodoncia (SEPA) y la Sociedad Española de Ginecología (SEGO).

Como destaca el Prof. José María Lailla, Presidente de SEGO y co-coordinador de la obra, “se ha pretendido reunir el mejor equipo de profesionales que han trabajado en este campo y aunar conocimientos” y que, como aclara, “nuestros pacientes no se deben tratar por especialidades: los pacientes deben ser considerados en su conjunto, ya que cualquier enfermedad que tiene lugar en una zona, órgano o tejido tiene influencia con todo el organismo”. En este sentido, el Dr. Pedro Bullón, co-coordinador del libro, subraya que “en las consultas odontológicas estamos tratando a pacientes y no a bocas: esto que puede parecer una obviedad, se olvida con mucha frecuencia”.

Según explica el Presidente de SEGO, “este manual se ha concebido por temas concretos en los que se les ha dado una orientación odontológica y otra ginecológica, para que el lector sea capaz de integrar los conocimientos y aplicarlos de una manera unida a su paciente”. En primer lugar, se revisan nociones básicas de las patologías periodontales, y después sobre la fisiología y características de la mujer. Los cambios hormonales que suponen la pubertad y los que induce la anticoncepción hormonal son revisados detalladamente, así como el impacto del embarazo en la salud bucodental; en este sentido, se hace especial hincapié en la diabetes gestacional, así como en la importancia de la lactancia en la salud de la madre y del lactante. También se destaca el efecto de las terapias hormonales sexuales en el periodonto. Se incide en la menopausia. El libro incorpora sencillas y prácticas recomendaciones de higiene y cuidados bucales, así como consejos terapéuticos para seguir durante el embarazo y la lactancia.

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