La vacunación también puede ser útil en las mujeres ya infectadas por el VPH

La vacunación frente al cáncer de cérvix puede beneficiar a mujeres que previamente han sufrido lesiones producidas por el virus del papiloma humano (VPH) y que, además, presentan factores de riesgo de desarrollar un cáncer

El virus del papiloma humano (VPH) es la causa necesaria para el desarrollo de un cáncer de cérvix, ya que desde que se produce una infección por uno de los tipos oncogénicos de este virus, que normalmente se elimina de manera natural, hasta llegar a tener un carcinoma ‘in situ’ o un cáncer invasor, la mujer puede tener lesiones de diferente grado de malignidad que se pueden tratar y curar.

Por ejemplo, las mujeres menores de 18 años de Castilla y León ya han sido vacunadas en un alto porcentaje, pero la carga de la enfermedad en función de las lesiones displásicas y preneoplásicas diagnosticadas aún es considerable. «Entre los 36 y los 45 años repunta el VPH en las mujeres y el papel de los ginecólogos no sólo en el tratamiento, sino también en la prevención de reinfecciones es muy importante», ha señalado el catedrático de Microbiología de la Facultad de Valladolid, Eiros Bouza en el marco del I Foro de Actualización en Prevención del Cáncer de Cérvix Castilla y León.

Asimismo, durante el foro, el profesor titular de Medicina y jefe de Sección del Servicio de Ginecología del Hospital Clínico Universitario de Salamanca, Angel García Iglesias, ha presentado datos del perfil etario y del grado de lesión de las mujeres con citologías positivas remitidas a su servicio durante tres años, así como del seguimiento y de la respuesta al tratamiento de las pacientes con lesiones cervicales.

Además, se ha debatido sobre la importancia de la respuesta inmune para prevenir las lesiones del cuello del útero y los factores que pueden alterarla, y de cómo la vacunación podría beneficiar a las pacientes con riesgo de presentar lesiones recurrentes que pueden terminar en un cáncer.

En este sentido, y en lo que puede considerarse una muestra representativa de todo Castilla y León, las mujeres con edades comprendidas entre 16 y 25 años presentaron con más frecuencia solo infección por VPH –el 40 por ciento–, mientras que las lesiones de bajo grado se producían más a menudo en el grupo de 26 a 30 años y las lesiones de alto grado aparecían sobre todo en las mujeres de 36 a 45 años y en menor medida en las de 31 a 35 años.

Reinfección y vacunación para prevenirla

No obstante, en todos los grupos etarios se identificaron lesiones de bajo grado y de alto grado de diversa consideración. Por ejemplo, se han diagnosticado lesiones de alto grado en chicas de 25 años y carcinomas en mujeres de 28 años. En este sentido, Iglesias ha señalado que, en ocasiones, hay pacientes que a los pocos meses de ser tratadas vuelven a estar infectadas por el VPH.

Según los resultados recogidos en su departamento en los últimos años, existe un número considerable de pacientes que vuelven a reinfectarse. En concreto, se identificaron recurrencias en más del 9 por ciento de las mujeres tratadas en su servicio y en el 18,70 por ciento de estas mujeres se registraron lesiones vaginales poshisterectomia a los 12 meses del tratamiento.

La experiencia acumulada ha permitido a los expertos conocer la importancia de la respuesta inmune al VPH y los factores que pueden alterarla. Asimismo, han establecido los factores de riesgo que favorecen la reinfección por VPH de algunas mujeres, tales como edad –más de 40 años–, tabaquismo, menopausia, tomar anticonceptivos largo tiempo, embarazos y abortos y grado de la citología –displasia que se mantiene durante tiempo–.

De hecho, en los casos de mujeres que ya han sido tratadas de una lesión causada por el VPH y presentan algunos de estos factores predictores, los expertos recomiendan la vacunación para prevenir una reinfección.