La vitamina E podría ayudar a disminuir los dolores de la menstruación, según un estudio

La vitamina E podría ayudar a disminuir los dolores y calambres menstruales, según un estudio elaborado por la Tarbiat Modarres University de Irán publicado en el British Journal of Obstetrics and Gynaecology.

Uno de los factores que propician la dismenorrea es el aumento de los niveles de prostaglandina F2 alfa en la sangre y sus metabolitos, por lo que este equipo de científicos iraníes decidió investigar las propiedades de la vitamina E (bloqueante de la prostaglandina) para paliar los dolorosos síntomas de la menstruación.

El equipo efectuó un cuestionario entre mil estudiantes de secundaria de Teherán de entre 16 y 18 años entre las que escogieron a 100 jóvenes con dismenorrea. Para poder establecer la gravedad de la dismenorrea, las chicas fueron entrevistadas por ginecólogos y se identificaron 32 chicas con dismenorrea leve, 34 con moderada y 34 con severa. Finalmente, se formaron dos grupos de cincuenta chicas cada uno, a las que se les asignó o bien vitamina E durante dos días antes y tres días después de empezar la menstruación, o bien placebo.

Tras dos meses de seguimiento, el equipo dirigido por el doctor S. Ziaei constató una disminución (que creen estadísticamente significativa) del dolor menstrual en el grupo que había tomado vitamina E. Si la media de dolor en las estudiantes de este grupo era de 5,5 sobre 10 puntos antes de empezar el tratamiento, la media se redujo a 3,5 tras tomar la vitamina E, mientras que las que tomaron placebo (que tenían también al inicio un nivel de 5,5) reportaron luego un dolor de 4,3 puntos.

La diferencia no es sustancial, con lo que se necesitarán nuevos estudios para confirmar los beneficios de esta vitamina en la disminución de la dismenorrea. La vitamina E está presente de forma natural en vegetales, frutas y verduras como el aguacate, boniato, brócoli, ciruela, espinacas, espárragos, manzanas, moras, plátanos, tomates y zanahorias.

Descargar elestudio en formato pdf desde el British Journal of Obstetrics and Gynaecology 2001;108:1181-1183 (se necesita Acrobat Reader).