Las aplicaciones de la técnica PET en el diagnóstico de enfermedades oncológicas y cerebrales

La exploración a través de la Tomografía por Emisión de Positrones, la técnica PET, es muy útil para diagnosticar el cáncer de pulmón, tumores colorectales, linfoma y melanoma, tumores de cerebro y enfermedades cerebrales en estadíos precoces.

La exploración a través de PET permite visualizar el metabolismo celular, algo que la convierte en una técnica eficaz para identificar los procesos iniciales de la enfermedad oncológica. En este sentido, el doctor José Ángel Richter, director del Servicio de Medicina Nuclear de la Clínica Universitaria de la Universidad de Navarra, comenta que «la masa tumoral se caracteriza por un aumento del metabolismo en comparación con el tejido normal» por lo que «la técnica PET aporta una alta sensibilidad y especificidad en el diagnóstico de malignidad y el estadiaje del tumor».

Otra aplicación de la técnica PET es el seguimiento de tumores cerebrales. Para evaluar el grado de malignidad del tumor antes de extirparlo y valorar su evolución después del tratamiento, la PET ofrece mayor sensibilidad que otras técnicas de neuroimagen para visualizar la lesión.

La técnica puede servir también para orientar al médico sobre la línea terapéutica a seguir, ya que después del tratamiento se producen cambios metabólicos en el tejido tumoral que pueden ser identificados a través de esta exploración. Según el doctor Richter, con la PET se puede predecir si el paciente responde al tratamiento y tomar otra decisión si no ocurre así.

Las enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer o la enfermedad de Parkinson pueden ser estudiadas a través de la técnica PET. Detectar precozmente este tipo de enfermedades es útil para tratar con fármacos a los pacientes lo antes posible. Esto aumenta la efectividad de algunos tratamientos farmacológicos actuales dirigidos a mejorar el estado funcional del paciente con demencia.

El doctor Richter valora también la mejora que la técnica PET representa para el diagnóstico de procesos cardiovasculares: «La aplicación clínica más importante es la detección de viabilidad miocárdica en pacientes con enfermedad coronaria crónica y mala función ventricular, generalmente con antecedente de infarto de miocardio». En este sentido la PET permite seleccionar las personas que pueden beneficiarse de la revascularización miocárdica mediante una exploración que caracteriza de forma no invasiva el metabolismo miocárdico.