Leche materna y corazón

06Sep. 04

Así lo refleja el estudio de un grupo de investigadores del Institute of Child Health de Londres (Reino Unido) publicado en la revista The Lancet.

La alimentación infantil con leche materna podría reducir el riesgo de aterosclerosis y por tanto de afecciones cardiovasculares en la vida adulta. Así lo refleja el estudio de un grupo de investigadores del Institute of Child Health de Londres (Reino Unido) publicado en la revista The Lancet.

Se conocen muchos beneficios de la alimentación infantil pese a que varios estudios anteriores, que asocian la lactancia con un riesgo reducido de afecciones cardiovasculares, se han visto limitados por fallos metodológicos como los diseños de estudios retrospectivos. Los autores del presente trabajo evaluaron prospectivamente si los niños nacidos prematuramente que se alimentaban con leche materna tenían una menor tendencia a mostrar marcadores de la aterosclerosis que los niños prematuros a los que se administró una fórmula de leche en polvo.

Se realizó un seguimiento de 216 adolescentes (de entre 13 y 16 años de edad) que en su infancia, a principios de los 80, habían sido asignados a recibir los distintos tipos de leche en dos experimentos para la nutrición infantil.

Entre las mediciones empleadas en el seguimiento para evaluar el perfil de lipoproteínas (como indicador del riesgo de aterosclerosis) estaba el ratio de colesterol malo (lipoproteínas de baja densidad) en relación con el bueno (lipoproteínas de alta densidad) y las concentraciones de la proteína c-reactiva CRP (mayores concentraciones se asocian con el desarrollo de la aterosclerosis).

Los adolescentes que habían recibido leche materna en la infancia registraban un 14 por ciento menos ratio de colesterol malo en relación con el bueno y menores concentraciones de CRP que entre los adolescentes que habían recibido una fórmula de leche en polvo en su infancia.