Médicos y pacientes renales defienden la detección precoz y la prevención de la enfermedad en el Día Mundial del Riñón

La Sociedad Española de Nefrología (SEN) y la Federación Nacional de Asociaciones para la Lucha Contra las Enfermedades Renales (ALCER) demandan mayor información y defienden las campañas de detección precoz como único medio de prevención de las enfermedades renales crónicas ante el Día Mundial del Riñón que se celebra bajo el lema ¡El Riñón, un órgano asombroso!.

El presidente de la Sociedad Española de Nefrología (SEN), el doctor Ángel Luis Martín de Francisco, recordó que es necesario «sensibilizar» a toda la población de que «es importante la detección precoz de la insuficiencia renal porque se puede prevenir tanto su progresión como las complicaciones asociadas».

Recientemente la SEN presentaba el estudio Epirce en el que se mostraba que actualmente un 13 por ciento de la población podría padecer una enfermedad renal; un 90 por ciento de los pacientes españoles desconocen que padecen una enfermedad renal; uno de cada cinco españoles que acuden a un centro de atención primaria también ha perdido la mitad de la función renal; uno de cada diez españoles padece ERC; y en adultos mayores de 18 años un seis por ciento de la población ha perdido ya más de la mitad de la función renal normal.

Además, el número de personas que llegan a diálisis porque pierden completamente la función renal crece anualmente entre un seis y un 10 por ciento, recordó. Pero los datos son aún peores si tenemos en cuenta que «de los pacientes con insuficiencia renal unos 5.000 al año llegan a diálisis y el resto se mueren en el camino». En gran medida, estas muertes se producen por problemas cardiovasculares ya que «el riñón es el centinela del corazón» y acarrea numerosos problemas vasculares.

Estas cifras -en su opinión- muestran que «la enfermedad renal es una enfermedad silenciosa y muy dañina» pero que tiene tratamiento. Además, tiene muchos efectos sobre la calidad de vida y produce un deterioro muy importante para muchas familias, pero desde el punto de visa económico tiene una importancia extraordinaria porque cada paciente tiene un costo muy elevado.

Por otra parte, recordó que existe un grupo de riesgo formado por todas aquellas personas adultas con hipertensión arterial, diabetes, que hayan padecido algún evento cardiovascular, obesos, con edad superior a 65 años y familiares de pacientes con enfermedad renal que deben someterse a dos pruebas «básicas», baratas y «sencillas». Se trata del cálculo de la función renal con las fórmulas derivadas de la creatinina plasmática en la sangre y la presencia de albúmina en la sangre.

En la misma línea, el presidente de ALCER, Alejandro Toledo, recordó que «tener una enfermedad renal no es una sentencia: con prevención y un diagnóstico precoz, sí se detecta a tiempo se puede vivir años con una cierta calidad de vida. De ahí, la importancia de la detección».

Como representante de los pacientes señaló que actualmente unas 20.000 personas viven con un riñón trasplantado y unos 22.000 pacientes sobreviven gracias a un tratamiento de diálisis. Ante esta situación considera que aprovechando el Día Mundial del Riñón hay que mandar un mensaje claro sobre la prevención y detección más teniendo en cuenta que podría convertirse en «una epidemia del siglo XXI» y que «la gente desconoce que el riñón es un órgano que se centra prácticamente toda la salud de nuestro organismo».

Principales demandas

Por su parte Toledo, que forma parte del Foro Abierto de Salud del Ministerio de Sanidad, afirmó que es importante implicar a todas las instituciones y desarrollar campañas de concienciación que ayuden en la prevención.

Asimismo, indicó entre las principales demandas un tratamiento integral de la enfermedad renal; que el paciente reciba formación para que «escoja libremente la su mejor opción de tratamiento»; se extienda la existencia de un consentimiento informado; y consultas de prediálisis o consulta de enfermedad renal crónica avanzada de enfermería de (ERCAL).

Además, solicitan equipos multidisciplinares con la atención psicológica, trabajadores sociales, dietista etc.; acabar con las listas de espera para la realización de las fístulas arteriovenosas, que «para un paciente es prácticamente su vida»; aumento de plazas de diálisis en época vacacional; solución para los problema de desplazamiento tanto entre comunidades como a nivel local; atención socio-sanitaria para pacientes renales mayores que no acceden a la ayuda de personas dependientes; y un mayor número de especialistas en enfermería nefrológica.

Mientras, desde la SEN su presidente indicó que es fundamental que el día sirva para concienciar a la sociedad, así como para que «los Gobiernos incorporen este asunto en sus agendas». Precisamente con este objetivo, desde SEN se está trabajando activamente con otras asociaciones para movilizar a la sociedad y a la Administración a favor de estos enfermos, explicó Martín de Francisco.

** El riñón, un órgano asombroso**

Bajo el lema ¡El Riñón un órgano asombroso! , las diferentes asociaciones de médicos y pacientes se han unido a la campaña internacional desarrollada por la National Kidney Foundation (NKF) y la Internacional Society of Nephrology (ISN) con la que pretenden transmitir a la población general y autoridades sanitarias la necesidad de una detección precoz de los pacientes con insuficiencia renal con vistas a prevenir el agravamiento y progresión de su enfermedad y especialmente, las complicaciones cardiovasculares asociadas.

Por su parte el presidente de la SEN destacó el papel de los farmacéuticos como «elemento fundamental de comunicación información y sensibilización». «Los farmacéuticos en general son importantes ante este problema, especialmente porque el consumo de medicamentos en España es elevadísimo y muchos deben de darse en dosis diferentes en función del grado de la enfermedad y otros no deben de darse. Por tanto, todas las entidades que están en la línea de cuidados a la población tenemos que trabajar en conjunto», añadió.

Mientras, ALCER lanza la campaña ´20.000 personas nunca van al servicio y no es por falta de ganas´, que pretenden crear un estado de conciencia entre la sociedad. En opinión de Toledo, se trata de uno de los mayores problemas que sufren este colectivo y la a población lo ignora. «Hay personas que no pueden orinar; es un verdadero tormento y pretendemos que la población lo conozca», añadió. Son personas cuyos riñones están dañados hasta el punto que pierden la función habitual de eliminar las toxinas de la sangre a través de la orina. Cuando los riñones funcionan sólo al 10 ó el 15 por ciento de su capacidad todavía existe la diálisis para ayudar a realizar sus funciones. Pero en la mayor parte de los casos y transcurrido un tiempo de haber entrado en diálisis – «de ocho meses a un años»- los riñones fracasan del todo, llegan al cero por ciento de capacidad de funcionar. Es entonces cuando la persona deja totalmente de orinar.