Ojo con el glaucoma

15Dic. 03

La diabetes, las enfermedades del corazón y la edad avanzada aumentan el riesgo

El glaucoma es una de las enfermedades de la vista más habituales y constituye la tercera causa de ceguera en el mundo. Consiste en un aumento de la presión en el interior del ojo que da lugar a lesiones en el nervio óptico, que es el encargado de transmitir la información visual al cerebro. Esta presión conlleva una reducción del campo visual y si se mantiene puede llegar a provocar una pérdida de visión irreversible e incluso la ceguera. No obstante, no siempre la presión dentro del ojo es un síntoma inequívoco de glaucoma ni la sufren todas las personas que padecen la enfermedad.

En algunos tipos de glaucoma el enfermo sufre síntomas como dolor de los ojos, enrojecimiento, visión de halos alrededor de las luces, etc. Sin embargo, en otras variantes de la enfermedad los síntomas no son perceptibles hasta que ya existe un daño irreparable en el nervio óptico. En estos casos, debido a que el enfermo pierde visión muy lentamente, muchas veces cuando acude al médico ya es demasiado tarde porque no puede recuperar la visión que ha perdido. Por ello, es importante que las personas con un mayor riesgo de padecer glaucoma estén especialmente atentos y se sometan a revisiones periódicas en el oftalmólogo:

– Mayores de 40 años: El glaucoma es más frecuente a partir de los 40 años y aun más después de los 60, por lo que los expertos recomiendan a partir de esa edad revisarse la vista como mínimo una vez al año.

– Problemas de circulación: Algunos estudios recientes han desvelado que la llegada de una cantidad insuficiente de sangre a los ojos puede ser un factor desencadenante del glaucoma. Por ello las personas con diabetes, tensión sanguínea elevada o muy baja u otros trastornos circulatorios tienen una mayor probabilidad de padecer la enfermedad.

-Antecedentes familiares: La existencia de casos previos de glaucoma en la familia debe aumentar el nivel de alerta ante cualquier indicio de la enfermedad.

-Otros factores de riesgo: Las personas que tienen una miopía elevada o sufren enfermedades del corazón son más proclives a desarrollar glaucoma.