Parkinson: mejor todos juntos

09Abr. 09

El 11 de abril se celebra el Día Mundial del Parkinson, este año con el objetivo de que administraciones públicas, profesionales, pacientes, medios de comunicación y sociedad en general aúnen esfuerzos para dar a conocer esta enfermedad que padecen 120.000 personas en toda España.

Son 120.000 personas en nuestro país, pero más de cuatro millones en todo el mundo, siendo la segunda enfermedad neurodegenerativa en prevalencia, tras el Alzheimer.

Por ello, este 11 de abril se pretende que administraciones públicas, profesionales, pacientes, medios de comunicación y sociedad en general aúnen esfuerzos para dar a conocer esta enfermedad y las necesidades de los familiares, que a menudo se encargan de su cuidado.

El Presidente de la Asociación Parkinson Madrid, José Luis Molero, explicó que ya se está trabajando en la creación de un Plan Regional de Salud y Atención Integral de la enfermedad de Parkinson con la Dirección General de Atención al Paciente de la Comunidad de Madrid y la Asociación Madrileña de Neurología. «De momento, se están sentando las bases de este ambicioso proyecto que pretende tratar de ofrecer un servicio más individualizado a los afectados de Parkinson, en el que el tratamiento multidisciplinar será el eje principal», señaló Molero. Para esta entidad es fundamental que el plan trate medidas para favorecer la detección precoz de la enfermedad, se realice un tratamiento personalizado de cada paciente (la enfermedad no les afecta de la misma forma) y se imparta rehabilitación para mantener el mayor grado de independencia del afectado.

En esta primera fase, se están analizando las necesidades de los afectados y los recursos y red con los que se cuentan para, en una etapa posterior, trabajar en la reorganización y planificación de los mismos, de forma que puedan resultar más eficaces. Para el presidente de la Asociación Parkinson Madrid «el objetivo de este plan es plantear también soluciones que no están disponibles en el sistema actual, como la creación de unidades de Parkinson o consultas monográficas con equipos interdisciplinares en los hospitales, realizar un registro de pacientes, disminuir las listas de espera, la existencia de un neurólogo especializado en las urgencias o impulsar la investigación, por lo que necesitamos el apoyo de la Administración Pública».

Además, Molero también considera importante «formar a los profesionales sobre la enfermedad y potenciar la información al paciente y sus familiares, así como promover fórmulas de cooperación efectiva entre los sistemas sanitario y social».

Por otro lado está el coste económico que supone esta enfermedad en las familias ya que las ayudas no cubren todos las necesidades y, a menudo, algún familiar directo (marido, esposa, hijos…) debe abandonar su trabajo para hacerse cargo del enfermo. Y es que según un trabajo realizado recientemente, el coste por persona dependiente y año va de los 4.300 euros en los casos leves hasta los 14.700, en los grandes dependientes.

La enfermedad de Parkinson

«A pesar de que los síntomas del Parkinson pueden variar mucho de una persona a otra, lo más común es la lentitud en el movimiento, el temblor y la rigidez, que interfieren en la vida del afectado porque tiene dificultades para algo tan cotidiano como darse la vuelta en la cama, coger los cubiertos o atarse los zapatos», explica la Dra. María José Catalán, neuróloga del Hospital Clínico San Carlos de Madrid.

A estos síntomas se pueden unir otros no relacionados con los trastornos motores como la ansiedad, la depresión, brotes psicóticos, trastornos sexuales, falta de control de impulsos, problemas de memoria, sudoración, pérdida de olfato o sialorrea. Para la Dra. Catalán, además de un correcto tratamiento farmacológico, «es muy importante acudir a terapias complementarias que ayudan física y emocionalmente al paciente; acudiendo a clases fisioterapia; la logopedia o la musicoterapia mantienen su estado físico y además comparten experiencias con afectados y cuidadores en su misma situación».