Se duplican las operaciones de aumento de senos

21Jul. 05

En España se han duplicado las operaciones de aumento de pecho, aunque el tamaño que solicitan hoy muchas mujeres queda lejos de unos pechos muy voluminosos. Si a principios de los 90, triunfaba la prótesis de silicona de talla cien, ahora se estila más alcanzar unas tallas 90 o 95, que den un aspecto más natural a unos senos que, en muchos casos, han perdido su forma tras el embarazo.

El objetivo del 40 por ciento de mujeres que se hacen una mamoplastia o aumento de senos es «recuperar su forma o agrandarlos después del embarazo y la lactancia», según expresa el doctor José Maria Palacín del Centro Médico Téknon de Barcelona y el doctor José Luis Martín Del Yerro, del Hospital Montepríncipe de Madrid, ambos cirujanos plásticos titulados. En muchos casos, «se trata de mujeres de unos 30-35 años, preocupadas por su imagen, que han perdido la forma inicial de su seno tras la maternidad y la lactancia; pero también hay mujeres que quieren más pecho, después de descubrirse durante el embarazo con un volumen superior de sus senos», afirma el doctor Martín.

La segunda causa de aumento de senos es para corregir deformidades y asimetrías de origen genético, sobre todo «en chicas jóvenes que, después de cumplir los 18 años y una vez el pecho se ha desarrollado completamente, presentan grandes diferencias de volumen». Según los especialistas, «estas mujeres acuden a nuestra consulta con un gran problema de baja autoestima, ya que para ellas el hecho de tener poco pecho, tenerlo asimétrico o caído, les coarta mucho en sus relaciones personales», expresa el doctor Del Yerro. En este sentido, «el hecho de no tener los dos pechos igual o tenerlos pequeños les causa verdaderos problemas psicológicos». Respecto a las chicas muy jóvenes que quieren operarse, ambos especialistas expresan que es un error hacerlo antes de los 18 años, según el código ético de la Sociedad Española de Cirugía Plástica. En este sentido, recomiendan «esperar a que la glándula mamaria se haya desarrollado completamente».

Por otro lado, los especialistas aconsejan huir de los institutos de cirugía estética que ofrecen una primera visita gratis o que intentan captar la atención de las pacientes a través de propaganda engañosa. En la mayoría de los casos, «no son profesionales cualificados para realizar cirugía de aumento de pecho y, además, esas primeras visitas son atendidas por comerciales, personas que ni tan siquiera son médicos», alertan los especialistas.

El tamaño del pecho: cuestión de moda y cultura

Mientras en Estados Unidos y Latinoamérica, las mujeres que se operan siguen demandando grande implantes para sus senos -prótesis de 200 y 300 gramos-, desde los años noventa hasta ahora, el gusto por unos pechos a lo Pamela Anderson han pasado a la historia en España. «El volumen del seno es uno de los principales cambios que ha experimentado las operaciones de mama en nuestro país»,afirman ambos especialistas. Así, mientras en la década de los noventa lo habitual era que las mujeres saliesen del quirófano con una prótesis parecida a unos pechos talla 100 del sujetador, «ahora predomina un gusto por la talla 90-95, para conseguir una mama más proporcionada y armónica con el cuerpo de la mujer». Según el doctor del Yerro «actualmente existe una tendencia hacia la moderación en el tamaño y la paciente reclama, ante todo, un pecho más natural».

Por otro lado, en los últimos años, «muchos cirujanos han realizado reducciones de pecho de mujeres que anteriormente se habían sometido a aumentos excesivos». En este sentido, «lo que aguanta la prótesis es la propia estructura del pecho y si la mama pesa mucho, con el tiempo acaba cayendo», concluye el doctor Palacín.