Sin aliento pero no indefenso

15Nov. 06

Uno de cada diez adultos de más de 40 años sufre Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), una enfermedad estrechamente vinculada con el consumo de tabaco y que conlleva una tasa de morbi-mortalidad muy elevada. Se calcula que el 80 por ciento de los pacientes con EPOC está sin diagnosticar y el 60 por ciento no están bien tratados. Bajo el lema Sin aliento pero no indefenso, se celebra el Día Mundial de la EPOC.

La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) es una enfermedad inflamatoria de las vías respiratorias y del tejido pulmonar que se caracteriza por la reducción del flujo de aire que puede expulsarse al realizar una espiración máxima. Se trata de una enfermedad crónica, de evolución lenta y progresiva que se asocia con una elevada morbi-mortalidad.

Esta enfermedad se ha convertido en uno de los problemas de salud más importantes de nuestra sociedad. Así, uno de cada 10 adultos de más de 40 años sufre una EPOC, enfermedad responsable de tres millones de muertes cada año en el mundo. Además supone un elevado coste económico y social. Tal es así, que en España supone 3.000 millones de euros al año sólo en gastos directos.

La mortalidad causada por la EPOC es la única que se ha ido incrementando a lo largo de los últimos años. «De hecho, la Organización Mundial de la Salud prevé que seguirá en aumento y que llegará a convertirse en la tercera causa de muerte en el mundo en 2020», explica el doctor Germán Peces-Barba, de la Fundación Jiménez Díaz de Madrid y delegado para España de la iniciativa GOLD.

Estas previsiones tan desalentadoras se deben al aumento de la población femenina fumadora y a la incorporación, cada vez más temprana, de los jóvenes al hábito tabáquico. No podemos olvidar la íntima relación entre esta patología y el tabaquismo, ya que tras más del 90 por ciento de los casos de EPOC está el tabaco.

El Dr. Peces-Barba, comenta que «la EPOC es una enfermedad de gran trascendencia, pero desconocida por la mayoría de los afectados (se calcula que el 80 por ciento de los pacientes está sin diagnosticar y de los diagnosticados, el 60 por ciento no está bien tratado), que provoca bloqueo de los bronquios, obstrucción al paso del aire a los pulmones, tos, expectoración y dificultad para respirar».

Por todo ello, con el fin de sensibilizar a la población sobre esta enfermedad, la organización internacional Global Initiative for Chronic Obstructive Lung Disease (GOLD) celebra hoy el Día Mundial de la EPOC bajo el lema Sin aliento pero no indefenso , que en España cuenta con el respaldo de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) y la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (SEMFYC).

Síntomas y diagnóstico de la EPOC

Tos, expectoración (producción de esputo), especialmente por las mañanas, y disnea progresiva (sensación de ahogo, de falta de aire) son los tres síntomas que definen la EPOC. Suelen aparecer alrededor de los 45 años y después de haber fumado durante muchos años.

Basta con la realización de una espirometría para confirmar el diagnóstico de EPOC, pero lamentablemente hoy en día, continúa siendo una enfermedad infradiagnosticada. Para alrededor del 70 por ciento de los pacientes el diagnóstico llega cuando la enfermedad se encuentra en fases avanzadas por lo que hasta ese momento no han recibido ningún tratamiento.

EPOC y tabaco

Esta situación es todavía si cabe más preocupante si se tiene en cuenta que se trata de una enfermedad «prevenible y tratable», según la más reciente de las guías, la realizada conjuntamente por las sociedades europea y americana, así como la guía española, próxima en aparecer.

Los factores más importantes que aparecen como causantes de la EPOC son el tabaco, la polución atmosférica y la exposición laboral a agentes tóxicos. Está completamente demostrado que el tabaco es la principal causa de EPOC hasta en un 95 por ciento de los casos debido a la agresión que produce sobre la mucosa pulmonar.

Por ello, si se erradicara el consumo de tabaco se podría eliminar la incidencia de EPOC casi en su totalidad. Respecto a la prevención, son fundamentales también las campañas de concienciación ciudadana de deshabituación tabáquica. La mejor prevención, por tanto, es no fumar o abandonar el hábito tabáquico.

EPOC y calidad de vida

A medida que progresa la enfermedad y se va reduciendo la capacidad pulmonar, el paciente con EPOC empieza a notar en mayor medida las limitaciones físicas que le impiden andar durante mucho tiempo, subir escaleras, afeitarse, conducir…

El impacto la EPOC en la calidad de vida de los pacientes y de sus familiares es enorme. A las limitaciones físicas hay que añadir otras patologías asociadas y la afectación psicológica que a menudo les conduce hasta la depresión. Por tanto, se requiere de un abordaje multidisciplinar que mejore todos estos aspectos.

Las asociaciones de pacientes ejercen una labor excepcional en la ayuda a los afectados y sus familiares ya que les enseñan a comprender su enfermedad, a saber respirar correctamente para aprovechar al máximo su reducida capacidad pulmonar y les ofrecen apoyo psicológico.

Tratamiento para la EPOC

En cuanto al tratamiento, el Dr. Peces Barba comenta que «es muy útil en el alivio sintomático, en la mejoría de la situación clínica general de los pacientes, en la prevención de las exacerbaciones y en la mejoría funcional pulmonar». Todo ello se ha visto favorecido por la introducción de las nuevas indicaciones farmacológicas. «Por ello, este año se insiste en el lema introducido el año pasado: Sin aliento, pero no indefenso , queriendo recordar que el tratamiento puede ayudar a los pacientes a vivir una vida plena», aclara.

Y es que la administración correcta de los tratamientos disponibles permite aumentar la supervivencia de los enfermos y mejorar su calidad de vida. En el tratamiento de la EPOC, la broncodilatación mantenida reduce los síntomas, las exacerbaciones y mejora el estado de salud. Además, la administración conjunta de broncodilatadores con corticoides inhalados mejora aún más estos resultados favorables.

«En definitiva -subraya el Dr. Peces Barba- es fundamental transmitir a la población que la EPOC puede prevenirse y tiene tratamiento». «Para ello es necesario hacer un diagnóstico precoz, es imprescindible suprimir el tabaco y es preciso instaurar el tratamiento adecuado», recuerda. Asimismo, es muy rentable prevenir y tratar eficazmente las agudizaciones de la enfermedad.