Síndrome de Guillain-Barré (I)

18Sep. 02

El síndrome de Guillain-Barré afecta a la comunicación entre los nervios, por lo que causa parálisis y pérdida de masa muscular, entre otros. Aunque su incidencia es baja (entre uno y dos afectados por cada cien mil habitantes), trunca la calidad de vida del paciente, ya que la curación puede en algunos casos tardar años.

El síndrome de Guillain-Barré (SGB) es una enfermedad llamada rara pues afecta a un número reducido de personas (en occidente, entre una y dos cada cien mil habitantes, según el país). Afecta a las raíces de determinados nervios y a los nervios periféricos, interrumpiendo la comunicación entre los nervios, lo que causa parálisis, debilidad muscular y cosquilleo o dolor en las extremidades. Se conoce también como polineuritis desmielinizante, pues en ella hay una inflamación de los nervios (polineuritis) y una pérdida de la mielina, la vaina que los recubre y facilita que los nervios emitan señales entre sí.

Afecta a ambos sexos y a todas las edades, aunque es mucho más raro que se manifieste en la infancia y es más probable que se manifieste al final de la adolescencia o al principio de la etapa adulta y durante la tercera edad. El SGB suele manifestarse después de que el paciente haya sufrido una infección viral respiratoria o gastrointestinal. En otros casos, pero con menos frecuencia, también puede aparecer después de una cirugía o vacuna.

Causa incierta

Ya que en la mayoría de casos, los síntomas de este síndrome aparecen a los pocos días o semanas de una infección viral o respiratoria, la teoría más extendida es que se trata de una enfermedad autoinmune, es decir, el sistema inmune del propio paciente, que luchó para eliminar el virus, ataca por error al propio sistema nervioso, destruyendo la cobertura de mielina de los nervios y de los axones, que son las extensiones de las células nerviosas que transmiten las señales nerviosas.

¿Por qué se ataca a sí mismo? Una explicación de los investigadores es que el virus que provocó la infección logra cambiar la naturaleza de las células del sistema nervioso, por lo que el organismo las identifica erróneamente como hostiles y las ataca. Otra explicación que se baraja es que el virus logra reducir la capacidad del sistema inmune para distinguir las células propias de las extrañas, facilitando el error.

Con qué síntomas se manifiesta

En todo caso, al fallar la comunicación nerviosa, los músculos dejan de responder a las órdenes del cerebro, causando parálisis. También el cerebro deja de recibir comunicaciones por lo que disminuyen las señales sensoriales y el paciente no recibe correctamente estímulos como tacto, frío, calor, dolor, etc. En algunos casos sólo siente una sensación de cosquilleo o dolor.

Como las señales que llegan desde los brazos y las piernas son las que recorren más distancia, y sufren más interrupción, la debilidad muscular y la sensación de hormigueo aparece primero en manos y pies y progresan rápidamente hacia arriba. Las manifestaciones más comunes son hipotonía (disminución anormal de la masa muscular), dificultad para caminar o mover las extremidades, disminución de los reflejos, hormigueos en pies y piernas, dolores y parálisis facial.

Sólo en algunos casos se dan mareos, provoca cambios en la conducta y provoca una disminución de la visión, por el ataque al sistema nervioso central. La complicación más importante de la enfermedad es la insuficiencia respiratoria y la insuficiencia cardíaca, cuando se ven afectados los músculos respiratorios o el músculo cardíaco.

Más información en:

Federación Española de Asociaciones de Enfermedades Raras (FEDER): Calle Enrique Marco Dorta, 6 local, 41018 Sevilla, Teléfono : 902 18 17 25, e-mail: f.e.d.e.r@teleline.es

Fundación Internacional Guillain-Barré

El SGB en la web del National Institute of Neurological Disorders and Stroke (En español)