Un tercio de todas las fracturas de cadera por osteoporosis ocurren en varones

El 20 de octubre se celebra el Día Mundial de la Osteoporosis una enfermedad que se considera femenina pero que también afecta a un número considerable de hombres. En concreto, hasta la tercera parte de los pacientes con osteoporosis son varones, sin embargo la mayoría de los casos masculinos de fracturas asociadas a esta patología siguen sin tratarse.

Hoy en día, la esperanza de vida tanto en hombres como en mujeres se ha elevado considerablemente. Por ello, muchas enfermedades asociadas a la edad, como es el caso de la osteoporosis, aquejan a estas personas haciendo que sus huesos sean más vulnerables y propensos a sufrir fracturas. Además, la osteoporosis representa un problema de salud pública que genera una importante demanda de atención sanitaria con un alto coste económico.

Se trata de una enfermedad del esqueleto caracterizada por un deterioro de la resistencia ósea que predispone a un mayor riesgo de fracturas. Es de rápida progresión una vez que se produce la primera fractura y se asocia a una significativa disminución de la calidad de vida, ya que es causa de pérdida de peso, deformidades, limitaciones funcionales, e incluso dolor, en su manifestación clínica más grave.

Tanto en hombres como en mujeres, el remodelado óseo se produce durante toda la vida, pero el balance entre formación y reabsorción de hueso en todo el organismo es positivo hasta la edad adulta. Es precisamente en la treintena cuando existe la máxima masa ósea, que se mantiene con pequeñas variaciones hasta los 50 años. A partir de la menopausia en las mujeres, predomina la reabsorción y la masa ósea empieza a disminuir, alrededor del 0,5% al año. Aquí es cuando más se aprecia la diferencia entre ambos sexos ya que el hombre, al tener una estructura esquelética más resistente que la femenina, tiene una degeneración más lenta.

Entre un 3 y un 6% de hombres después de los 50 años tendrá osteoporosis. La incidencia total de fracturas hasta los 45 años es mayor en el sexo masculino, probablemente por el mayor número de traumatismos padecidos con anterioridad, y a partir de los 75 años la osteoporosis en hombres se eleva de forma brusca.

Aunque aparece en edades superiores a la de las mujeres, prácticamente en una década posterior, un tercio de todas las fracturas de cadera por osteoporosis ocurren en varones y, estadísticamente, un 20% de los afectados tendrá otra fractura de cadera posteriormente. Además, la tasa de mortalidad masculina en el año siguiente a la fractura es el doble que la femenina, siendo de un 37,5%. Por el contrario, la incidencia de fracturas vertebrales osteoporóticas, con repercusión clínica, es casi la mitad en varones que en mujeres.

Las causas más frecuentes de la osteoporosis masculina, a diferencia de la osteoporosis femenina – posmenopáusica- son hipercortisolismo, hipogonadismo y alcoholismo.

En los últimos años, han aparecido los fármacos formadores de hueso, siendo Forsteo el único osteoformador indicado en el tratamiento de la osteoporosis en varones de alto riesgo, además de tener indicación en mujeres con osteoporosis posmenopáusica y tanto hombres como mujeres que toman glucocorticoides.

Hay estudios que demuestran la eficacia de Forsteo para tratar la osteoporosis en varones con alto riesgo de fracturas. En concreto el estudio de registro de varones, se trata de un estudio multinacional, aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo en la fase III para evaluar la eficacia y seguridad de teriparatida. En este estudio se incluyeron a 437 varones con osteoporosis primaria o secundaria a hipogonadismo (definida por niveles bajos de testosterona libre por la mañana o niveles elevados de FSH o LH) o idiopática y valores medios de T-score de densidad mineral ósea en columna y cuello femoral al inicio del ensayo de -2,2 y -2,1, respectivamente. El 35 % de los pacientes tenían una fractura vertebral previa y un 59 % tenían una fractura no vertebral en el momento de entrar en el ensayo.

Los pacientes recibieron una inyección subcutánea diaria de teriparatida 20 microgramos, teriparatida 40 microgramos o placebo, autoadministrada, durante una media 11 meses (máximo 15 meses). Todos los pacientes recibieron suplementos de calcio (1000 mg/día) y de vitamina D (de 400 a 1.200 IU/día). Posteriormente se realizó un estudio de seguimiento de estos pacientes para evaluar la DMO (Densidad Mineral Ósea) y la incidencia de fracturas vertebrales durante 30 meses tras retirada del tratamiento.

En estos estudios los autores observaron que teriparatida 20 microgramos produjo un aumento estadísticamente significativo en la DMO lumbar en hombres con osteoporosis desde los 3 meses de tratamiento y a lo largo de todo el periodo de seguimiento. Se observó un aumento estadísticamente significativo en la DMO de cuello de fémur en varones tratados con teriparatida 20 mircrogramos y teriparatida 40 microgramos. Concretamente, a los 12 meses de tratamiento, la DMO en la rama de teriparatida 20 aumentó en la columna lumbar y en cadera total en un 5 % y 1 % respectivamente, en comparación con placebo.

La administración de teriparatida 20 subcutánea diaria en varones fue bien tolerada. Además, se observó un aumento transitorio de calcio sérico y urinario, auque no se consideró clínicamente significativo.

Durante el estudio de seguimiento, se mantuvo el aumento de la DMO en los varones tratados con teriparatida. Durante los 30 meses de seguimiento, la incidencia de nuevas fracturas vertebrales en los pacientes tratados con teriparatida se redujo en un 51% comparado con placebo (reducción del riesgo absoluto del 6%, p=0,07). La incidencia de nuevas fracturas moderadas o graves en la combinación de las ramas de teriparatida se redujo significativamente en un 83% (reducción de riesgo absoluto del 5,7%, p=0,01) comparado con placebo.

Cómo prevenir la osteoporosis

El primer paso para la prevención de la osteoporosis es poner todos los requerimientos necesarios para alcanzar un buen pico de masa ósea al llegar a los 30 años. Cuanto más fuertes llegan los huesos a la edad adulta, menos probabilidad hay de que la pérdida de masa ósea derive hacia la osteoporosis. Por tanto, se recomienda ingerir alimentos con gran aporte de calcio (sobre todo lácteos) y vitamina D, realizar ejercicio físico y llevar un estilo de vida saludable.

A partir de los 50 años, es importante determinar si el paciente presenta o no osteoporosis. La densitometría ósea ayuda al médico a valorar el estado de los huesos, pero también, hay signos y otros factores de riesgo asociados a la osteoporosis que nos pueden hacer sospechar esta posibilidad, como por ejemplo, la pérdida de altura. Bajar de talla de 1,5 a 2 cm anuales es señal de fracturas vertebrales que pueden ser provocadas por la osteoporosis. Es muy recomendable que a partir de los 50 se realicen revisiones periódicas tanto en hombres como mujeres.