Una nueva técnica para conocer el estado de las arterias

Esta nueva técnica, a diferencia de las que se utilizan hasta ahora, permite diagnosticar un elevado porcentaje de pacientes que tienen un riesgo alto de sufrir un infarto a corto o medio plazo. Según ha anunciado Fuster durante su participación en el XIV Congreso Nacional de la Sociedad Española de Arteriosclerosis, este sistema se empezará […]

Esta nueva técnica, a diferencia de las que se utilizan hasta ahora, permite diagnosticar un elevado porcentaje de pacientes que tienen un riesgo alto de sufrir un infarto a corto o medio plazo. Según ha anunciado Fuster durante su participación en el XIV Congreso Nacional de la Sociedad Española de Arteriosclerosis, este sistema se empezará a aplicar en el mes de junio en el centro que coordina en Estados Unidos.

Valentí Fuster ha estado trabajando en esta técnica desde hace más de cinco años y la ha empleado de forma experimental en decenas de voluntarios durante este tiempo. El próximo mes ya empezará su uso con fines clínicos y gracias a un acuerdo de colaboración del Instituto Cardiovascular del Centro Médico Mount Sinai con otros siete centros de Estados Unidos, se extenderá esta técnica para analizar la respuesta entre varios colectivos de enfermos. Para su aplicación en otros países, como España, habrá que esperar todavía bastante tiempo.

Mediante la resonancia magnética de alta definición «se podrá visionar el sistema arterial coronario y determinar si hay placas arterioscleróticas de alto riesgo», asegura Fuster. Además de la resonancia magnética, la técnica se combina con la introducción de isótopos radioactivos en la sangre para observar el riego sanguíneo de una determinada zona, como pueden ser el corazón o el cerebro. Ya que esta técnica, permite también predecir el riesgo de infarto cerebral.

De momento el sistema se pondrá en práctica a partir de dos máquinas separadas y se espera poder «obtener un dispositivo único» en el plazo de un año, según ha explicado el cardiólogo. Uno de los motivos por los que esta técnica tardará en estar disponible es por su sofisticación, ya que dada su complejidad técnica precisa de un equipo numeroso en el que además de médicos debe haber físicos y además su aplicación supone un alto coste económico.

Pese a todo, Valentí Fuster se muestra esperanzado con los buenos resultados obtenidos hasta el momento. Este nuevo procedimiento abre nuevas expectativas en el tratamiento de las enfermedades coronarias, ya que se podrá saber si hay arteriosclerosis en las fases iniciales y tratar la enfermedad de manera precoz.