Una nueva técnica quirúrgica para la incontinencia urinaria reduce las complicaciones

La incontiencia es una patología muy frecuente entre las mujres y se considera uno de los problemas de salud que más preocupa a quien lo sufre por su mala calidad de vida y las implicaciones emocionales que supone. Hasta un 50 por ciento de las mujeres presentan algún tipo de incontinencia ocasional y cerca de un 10 por ciento incontinencia frecuente. En esta entrevista el Dr Petros, del Royal Perth Hospital Western (Australia), creador de la técnica nos explica los detalles.

M edicinaTV: ¿En qué consiste esta nueva técnica quirúrgica?

Dr Petros: La nueva técnica del implante TFS (Sistema de Fijación Tisular) se basa en mi trabajo «la Teoría Integral». Durante 20 años, me he dedicado al estudio anatómico, mecánico y urodinámico del suelo pélvico. He establecido la Teoría Integral que permite restaurar la anatomía para recuperar las funciones de este suelo pélvico. Eso abre nuevas perspectivas. Antiguamente se podía tratar quirúgicamente sólo la incontinencia urinaria y los prolapsos. Ahora, con esta técnica se puede curar: incontinencia de esfuerzo de urgencia, el vaciamiento anormal de la vejiga, la frecuencia urinaria, la nicturia y el dolor pélvico. El concepto sobre el que se basa la teoría es ver el suelo pélvico como un sistema sinérgico. La cinta TFS es un nuevo sistema -100% polipropileno-, que lleva unos arpones de anclaje. En lugar de poner una cinta suburetral, en el caso de la incontinencia o, una malla grande en caso de prolapso, se utilizan cintas con arpones que actúan como vigas y que reparan el suelo pélvico, allí donde es necesario.

¿Qué mejoras supone respecto a las técnicas que se usan habitualmente?

Es un tratamiento mucho más anatómico y mucho menos invasivo que las técnicas utilizadas habitualmente. Además, esta técnica es útil y ofrece soluciones para la disfunción del vaciado vesical, polaquiuria y tenesmo, nicturia, incontinencia fecal idiopática y el dolor pelviano y no solamente la incontinencia urinaria de esfuerzo.

¿Hasta que edad se puede realizar este tipo de cirugía?

La técnica permite tratar a pacientes adultas hasta los 90 años.

¿Y qué tipo de anestesia requiere?

Se puede usar anestesia local, peridural, intradural o general si es preciso. Aunque las operaciones han sido desarrolladas para hacerse bajo anestesia local.

¿Qué tipo de problemas ocasiona el descenso del suelo pélvico más allá de la incontinencia?

Las implicaciones psicosociales por ejemplo, son muy importantes en estas pacientes. Otro problema que merece atención son los dolores pélvicos (durante las relaciones sexuales o sin relación con éstas), estos dolores no quedan bien explicados anatómica ni fisiológicamente, pero he descubierto que pueden ser solucionados en un 80 por ciento de los casos con la cirurgía.

¿En qué casos es recomendable pasar por el quirófano?

Cuando la paciente presenta un prolaspo de nivel mayor o bien presenta un prolapso mínimo con síntomas (frecuencia, estreñimiento, nicturia, urgencia, dolor pelviano).

Las mejoras en el control y preparación del parto con la fisioterapia del suelo pélvico, ¿han modificado esta patología?

La fisioterapía puede ser de gran utilidad en algunos casos, especialmente para el refuerzo de la musculatura durante la preparación del parto e inmediatamente después. Aunque, si hay daños demasiado importantes en los tejidos conjuntivos y los ligamentos durante el parto, se deben reparar mediante la cirugía. El concepto de la Teoría Integral, depende de la debilidad de los ligamentos y de los tejidos conjuntivos.

¿Están las mujeres suficientemente concienciadas frente a las patologías de suelo pélvico?

No, porque muchas mujeres aceptan estas patologías como «debidas a la edad». Además los médicos de cabecera no están, en muchas ocasiones, bien informados sobre las nuevas técnicas que existen para tratar este tipo de problemas. Para hacer una reparación completa y anatómica del suelo pelviano, conociendo los principios de la Teoría Integral, el médico debe buscar todos los síntomas relacionados con esta patología -disfunción del vaciado vesical, polaquiuria y tenesmo, nicturia, incontinencia fecal idiopatica y dolor pelviano- y no sólo la incontinencia urinaria de esfuerzo.