Vivir la menopausia

13Oct. 00

La esperanza de vida ha aumentado considerablemente en España en las últimas décadas, en concreto, esta esperanza de vida se sitúa en los 81 años para las mujeres. Esto hace que, llegado el momento de la menopausia, la mujer tenga todavía muchos años de vida por delante, este periodo puede ocupar casi un tercio de su vida. De ahí la importancia de que las mujeres estén bien informadas sobre los cambios que van a sufrir y la mejor manera de tratarlos para mantener su calidad de vida.

En primer lugar, hay que diferenciar claramente entre menopausia y climaterio ya que son dos conceptos diferentes que muchas veces se utilizan como si fueran lo mismo. La menopausia es la desaparición de la menstruación, para poder ponerle fecha a la menopausia se deben esperar doce meses desde la última menstruación, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). El climaterio, en cambio, es la etapa en la que se producen una serie de cambios en el organismo de la mujer: desaparece la menstruación, cesa la función reproductora, hay una disminución de la función ovárica,. Esta etapa suele comprender desde los 45 a los 65 años. Vemos por tanto que la menopausia es un momento concreto y el climaterio una etapa más larga.

La menopausia suele aparecer entre los 45 y 55 años, variando de unas mujeres a otras. Se considera que hay una menopausia precoz cuando se produce antes de los 40 años, esto puede ser debido a una insuficiencia de los ovarios o a alguna enfermedad, aunque también influye el ser fumadora. Antes de que desaparezca por completo la menstruación, suele haber un periodo de desarreglos en el que las reglas pueden ser más escasas o más abundantes de lo normal y también se pueden producir a intervalos irregulares.

La característica principal es el descenso de las funciones de los ovarios, que van a ir disminuyendo la producción de estrógenos (hormonas femeninas). Esto es lo que hace que aparezcan una serie de síntomas que pueden ser diferentes de una mujer a otra. «La menopausia no es una situación idéntica para todas las mujeres sino que es un proceso por el que pasan de forma diferente, dependiendo de una serie de variables: el peso corporal, los antecedentes de enfermedades que hayan tenido, los hábitos de vida,.todo esto predetermina cómo se desarrollará su menopausia», explica el doctor Joaquim Calaf, especialista en Ginecología y Obstetricia del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau (Barcelona). En realidad, hay muchas mujeres que no notan grandes cambios físicos ni psíquicos cuando llegan a la menopausia.

Síntomas y trastornos asociados

Los cambios asociados al climaterio son muy diversos y no sólo tienen que ver con el aparato reproductor femenino, en realidad, pueden influir prácticamente en todo el organismo. Algunos de estos cambios se perciben fácilmente desde la menopausia, otros en cambio pueden llegar años después como consecuencia a largo plazo del déficit de estrógenos. Estos son los principales síntomas y trastornos asociados al climaterio:

Sofocos , uno de los síntomas más frecuentes. Es una sensación brusca de calor que se nota sobre todo en la cara y el cuello, la piel de estas zonas se enrojece y puede ir acompañado de sudoración.

Trastornos del sueño. Durante la menopausia puede haber insomnio relacionado con la disminución de los estrógenos, en otros casos pueden ser los sofocos nocturnos los que provoquen una falta de sueño.

Alteraciones genitourinarias. Entre los síntomas vaginales se puede destacar: la sequedad vaginal, disminución de la elasticidad, aumento de las infecciones y molestias durante las relaciones sexuales. En cuanto a los problemas urinarios, puede haber incontinencia urinaria, micciones frecuentes e infecciones urinarias recurrentes.

Cambios psicológicos. Durante esta época las mujeres suelen padecer cambios de humor, irritabilidad, nerviosismo e, incluso, depresión. Estos cambios no se pueden asociar directamente a la disminución de estrógenos, sino más bien a cuestiones de tipo social o familiar y al cambio de roles de la mujer al llegar a una determinada edad.

Osteoporosis. Es un problema que puede aparecer a largo plazo debido a los cambios hormonales. Se caracteriza por una pérdida de la cantidad de masa ósea, por lo que los huesos pierden densidad y se hacen más frágiles con el consiguiente peligro de fracturas.

Enfermedades cardiovasculares. Al igual que la osteoporosis se trata de un riesgo a largo plazo, pero que también debe tenerse muy en cuenta. Los estrógenos protegen el sistema cardiovascular, de manera que cuando disminuyen aumenta el colesterol «malo» y por tanto el riesgo coronario.

Acudir al ginecólogo

«Lo que es importante es dar a cada mujer lo que necesita, hay un porcentaje de mujeres que desde el punto de vista medicamentoso no necesitan nada sino que lo que hace falta es que revisen sus hábitos saludables de vida, que hagan ejercicio, que corrijan la dieta, que valoren que hay una cantidad adecuada de calcio en los alimentos que toman, etc.», explica el doctor Calaf. En cambio «para otras mujeres que tengan sintomatología como sofocos, problemas de concentración, dificultades para dormir, irritabilidad, dolores articulares,. valdrá la pena plantear una Terapia Hormonal Sustitutiva», añade el especialista.

En primer lugar, es importante destacar el papel del ginecólogo durante esta época. Muchas mujeres no visitan al médico hasta que padecen alguno de los síntomas propios de la menopausia, pero existe también un amplio porcentaje (más de un 35 por ciento) que ante estos síntomas no visita a su médico. El especialista puede solucionar la falta de información que existe en algunos casos y evaluar cuál es el tratamiento más adecuado para cada caso. Esta es la mejor manera para romper con los viejos patrones establecidos, como el familiar o el de las amigas. «Yo le daría un consejo a la mujer: que no se preocupe pero que se ocupe de la menopausia y que nos ayude a desterrar, cariñosamente, a esa figura que es la vecina de cabecera que seguramente tanto ha contribuido a que se extiendan esos tópicos y pequeños errores con que los médicos y ginecólogos tienen que pugnar cada día para hacer una mejor salud», aclara Vicente Beneyto, director del Centro de Información de la Menopausia.