El salbutamol está indicado, solo o en combinación con otros fármacos, en el tratamiento del asma y también como profilaxis y tratamiento del broncoespasmo asociado a distintas condiciones, como el asociado al ejercicio físico o a la enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
Este fármaco lo podemos encontrar en forma de jarabe para administración oral, en forma de solución inyectable para administración intramuscular, intravenosa o subcutánea y como aerosol para inhalación bucal. También está disponible en presentaciones en combinación con beclometasona, un corticoide, en forma de aerosol para inhalación bucal, con indicación en el tratamiento del asma cuando el salbutamol solo no es suficiente para controlar los síntomas.
Para algunos pacientes puede ser complicado coordinar la pulsación con la inhalación, por ejemplo, en el caso de bebés y niños. En estos casos puede ser recomendable el uso de cámaras de inhalación, que facilitan la correcta administración del medicamento.
Posibles efectos adversos del salbutamol
Los posibles efectos adversos del salbutamol pueden cambiar en función de la vía por la que ha sido administrado. Cuando se usa por vía oral o en formas inyectables, los efectos adversos más frecuentes son temblor, taquicardia, palpitaciones o dolor de cabeza. La inhalación bucal conduce al fármaco directamente a los pulmones, reduciendo el riesgo de efectos adversos.