Tapentadol: ¿Cuándo y cómo debemos tomarlo?
El tapentadol es un analgésico opioide que se utiliza para tratar el dolor crónico intenso en adultos, cuando otros analgésicos no han sido efectivos. Actúa sobre los receptores opioides del cerebro, bloqueando las señales de dolor que se envían al cuerpo.
Este medicamento se prescribe únicamente cuando el dolor es intenso y no se alivia con otros analgésicos menos potentes. Es fundamental seguir siempre las indicaciones del médico y no automedicarse.
¿Cómo se administra el tapentadol?
El tapentadol se presenta en forma de comprimidos o comprimidos de liberación prolongada, en dosis que van desde los 25 mg hasta los 200 mg. La dosis se ajusta de forma individualizada, en función de la intensidad del dolor y la respuesta del paciente.
Habitualmente, se comienza con una dosis baja, que se irá aumentando gradualmente hasta controlar el dolor. Es crucial seguir las indicaciones del médico en cuanto a la dosis y la frecuencia de administración.
Efectos secundarios del tapentadol
Como todos los medicamentos, el tapentadol puede causar efectos secundarios, aunque no todas las personas los experimentan. Los más comunes son:
Estos efectos suelen ser más frecuentes al inicio del tratamiento y tienden a disminuir con el tiempo.
Es importante destacar que la interrupción brusca del tratamiento con tapentadol puede provocar un síndrome de abstinencia. Por ello, si se necesita suspender el tratamiento, el médico reducirá la dosis de forma gradual.
Recomendaciones generales
Conservar el medicamento en un lugar fresco y seco, fuera del alcance de los niños.
No se debe consumir alcohol durante el tratamiento con tapentadol.
Informar al médico de cualquier otro medicamento que se esté tomando, incluyendo medicamentos de venta libre y productos a base de hierbas.
En caso de experimentar cualquier efecto adverso, se debe consultar al médico o farmacéutico.