Té verde: cuándo y cómo disfrutarlo
El té verde, una infusión milenaria originaria de China, ha ganado gran popularidad en los últimos años debido a sus múltiples beneficios para la salud.
¿Qué hace tan especial al té verde?
Su secreto reside en la alta concentración de antioxidantes, sustancias que protegen nuestras células del daño causado por los radicales libres, responsables del envejecimiento prematuro y diversas enfermedades.
Beneficios del té verde:
Combate la fatiga: La teína presente en el té verde actúa como un estimulante natural, ayudando a combatir la fatiga y mejorar la concentración.
Mejora la función cerebral: Diversos estudios sugieren que el té verde puede mejorar la función cerebral, favoreciendo la memoria y la concentración.
Protege el corazón: Sus antioxidantes contribuyen a reducir el colesterol LDL (colesterol "malo") y la presión arterial, factores de riesgo para enfermedades cardíacas.
¿Cómo preparar el té verde correctamente?
Para disfrutar plenamente de sus beneficios, es importante prepararlo adecuadamente. Sigue estos consejos:
Utiliza agua filtrada y caliéntala hasta que alcance entre 80-90°C. Evita hervir el agua, ya que puede afectar el sabor y las propiedades del té.
Añade una cucharadita de hojas de té verde por taza. Puedes utilizar hojas sueltas o bolsitas de té.
Deja infusionar durante 2-3 minutos. Un tiempo de infusión más prolongado puede resultar en un sabor amargo.
Retira las hojas de té o la bolsita y disfruta.
¿Cuándo tomar té verde?
Puedes disfrutar de una taza de té verde en cualquier momento del día. Sin embargo, debido a su contenido en teína, se recomienda evitar su consumo en las últimas horas del día para no interferir con el sueño.
En resumen, el té verde es una bebida saludable y deliciosa que puede aportar numerosos beneficios para la salud. Incluirlo en tu dieta diaria es una excelente manera de cuidar tu bienestar.